La insuficiencia cardíaca ocurre cuando el corazón no bombea la sangre de una manera eficiente como debería hacerlo normalmente.
Ciertas afecciones tales como las arterias estrechas, la presión arterial, la falta de ejercicio, hacen que el corazón se vuelva demasiado débil o rígido como para bombear sangre de forma eficaz.
Esta enfermedad genera el 35% de las muertes causadas por problemas cardiovasculares que se producen entre la población femenina.
La incapacidad del corazón de bombear sangre en los volúmenes adecuados para satisfacer las necesidades del metabolismo, es un proceso que generalmente empeora con el tiempo a menos que se tomen los correctivos necesarios.
La insuficiencia cardíaca representa un reto para los sistemas de salud
Durante la última década se ha presentado un cambio en el perfil de las enfermedades catastróficas en las mujeres, pues los hábitos de vida se han modificado, y como consecuencia se ha incrementado la aterosclerosis y sus factores de riesgo.
Las estadísticas en Estados Unidos muestran que más del 50% de los casos de hospitalización por insuficiencia cardíaca corresponden a pacientes de sexo femenino. Esta es la primera causa de hospitalización en mujeres mayores de 65 años y explica el 35% de las muertes por causa cardiovascular.
El riesgo de desarrollar insuficiencia cardíaca en la mujer se incrementa con la edad
Las mujeres pasan gran parte de su vida dedicadas al cuidado de su familia y esto genera menor preocupación por su estado de salud, razón por la cual consultan de manera tardía al médico o no sacan el tiempo necesario para realizar actividad física.
Las mujeres con insuficiencia cardíaca tienen una peor calidad de vida, más síntomas y más diagnósticos de depresión.
Lo más importante hoy en día es que las mujeres entiendan que estos problemas de salud se pueden prevenir si se empiezan a hacer unos cambios en sus estilos de vida, sin esperar a que sea demasiado tarde. Con estas transformaciones pueden tener a futuro una vida más sana y sin complicaciones.
Hacer ejercicio cardiovascular mínimo cinco veces por semana, caminar, montar en bicicleta, hacer aeróbicos, nadar, bailar, reducir el sodio en los alimentos, controlar el estrés, estar dentro de los parámetros adecuados de porcentaje de grasa corporal, evitar estar en sobrepeso o en obesidad, evitar la presión arterial alta, y la diabetes, son algunas de las recomendaciones para prevenir la insuficiencia cardíaca.
Invitamos a las mujeres del Oriente a que sigan estas recomendaciones para que tengan una mejor calidad de vida y disfruten de sus familias a plenitud.
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