La producción agrícola a nivel mundial ha incrementado de forma notoria en los últimos años. Esto se debe a los grandes avances tecnológicos que están surgiendo y a la adopción de dicha tecnología por parte de aquellos que forman parte del sector. Además de los dispositivos inteligentes, la tecnología geoespacial es otro de los grandes aliados de agricultores, compañías de seguros, empresas de consultoría, banca e instituciones financieras, etc.
Las imágenes de satélite, en conjunción con los datos GPS, son capaces de proporcionar una enorme cantidad de información sin la necesidad de estar físicamente presente en el campo. Desde la monitorización visual de los cultivos hasta datos más avanzados, como la humedad del suelo o los niveles de evapotranspiración, los datos geoespaciales facilitan la gestión del campo y la transformación de la agricultura hacia formas más sostenibles.
Practicar la agricultura inteligente con EOS Data Analytics
Una de las formas más eficientes de adecuarse a los preceptos de la agricultura inteligente es contar con una plataforma que permita recopilar y analizar múltiples tipos de datos, de modo que se pueda conocer al detalle cada parámetro del campo. Esa es la propuesta de EOS Data Analytics, proveedor de análisis de datos satelitales. Sus soluciones geoespaciales están enfocadas a mejorar la toma de decisiones en más de 20 sectores diferentes, gracias a la información útil y precisa que muestran. Esta información se obtiene de la combinación de imágenes de satélite con algoritmos propietarios, inteligencia artificial y aprendizaje automático.
El principal producto de la empresa es EOSDA Crop Monitoring, una plataforma en línea diseñada para monitorizar los campos agrícolas. No solo permite analizar datos satelitales mediante índices de vegetación, también cuenta con información meteorológica relevante. La función Zonificación divide el campo en subzonas, en función del resultado proporcionado por uno o varios índices de vegetación, lo que permite crear mapas de productividad con los que realizar aplicaciones de tasa variable de insumos, maximizando el rendimiento y reduciendo el gasto. Con la función Exploración, los agricultores y dueños de las explotaciones agrícolas podrán asignar tareas a los técnicos de campo cuando sea necesario una inspección in situ y controlar su ejecución; por su parte, los técnicos disponen de una app móvil que funciona también sin conexión a Internet con la que podrán rellenar sus informes y adjuntar fotos a ellos.
Otras funciones útiles de la plataforma son sus completos análisis con los que obtener múltiples datos (salud de los cultivos, humedad del suelo, datos de elevación, etc.); el Registro de actividad, donde planificar todas las tareas a realizar dentro de una temporada; la función Riesgo de enfermedad, que alerta sobre cualquier desviación o problema en los cultivos para que se puedan tomar medidas antes de que la enfermedad se descontrole; o la función Cuenta de equipo, con la que asignar permisos personalizados a cada empleado respecto a cuánta información puede ver o editar.
Análisis geoespacial para los procesos agrícolas
A la hora de hablar de análisis de datos geoespaciales, se suele hacer de forma general, puesto que hay muchas opciones disponibles, en función del resultado que se busca. Estos son algunos de los análisis más utilizados habitualmente:
- Predicción del rendimiento de los cultivos: Este tipo de análisis es de suma utilidad para varios agentes del sector. Permite a las empresas agrícolas crear una planificación presupuestaria y una previsión de beneficios realista de antemano; a las empresas dedicadas a la venta de alimentos, estimar la cantidad de un alimento concreto que habrá disponible y cuál será su precio estimado de venta; y a los gobiernos, comprobar si la seguridad alimentaria está garantizada. Para realizar esto, se usan datos históricos del campo o la región y algoritmos de redes neuronales convolucionales.
- Estrategias mejoradas para mitigar pérdidas: Los datos actualizados sobre patrones meteorológicos, niveles de humedad del suelo y el crecimiento de los cultivos permite anticiparse a riesgos potenciales, como sequías o inundaciones, desarrollando mejores estrategias para contrarrestarlos.
- Gestión del riesgo climático: Las imágenes de satélite son una de las mejores pruebas visuales del efecto del cambio climático en la Tierra y la amenaza que supone para la productividad agrícola. Gracias a esta fuente de información, se pueden evaluar e identificar qué riesgos asociados al clima podrían afectar a un determinado campo o región y minimizar su impacto negativo.
- Promoción de la agricultura de precisión: Pese a las numerosas evidencias existentes, todavía existe cierto escepticismo respecto al valor y funcionamiento de las nuevas prácticas agrícolas, bien por falta de conocimiento de cómo funcionan o por la falta de inversión. Mostrar el funcionamiento con datos ayuda a fomentar y adoptar las prácticas de agricultura de precisión, haciendo a los agricultores elegibles para algunas subvenciones gubernamentales basadas en los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU y otras iniciativas sostenibles.
El futuro de la agricultura basada en datos satelitales
La agricultura es un sector económico fundamental en todo el mundo y el pilar básico de la seguridad alimentaria. Puesto que la población mundial sigue creciendo de forma notoria, muchas empresas y agricultores individuales deben replantearse su forma de trabajar el campo, de modo que aumente la productividad y esté garantizado el suministro de alimentos, ambas cosas preservando los recursos naturales y protegiendo el medioambiente. Para lograr esto, el análisis de datos geoespaciales y las imágenes de satélite son fundamentales y tienen un historial probado de éxito en su utilización. En combinación con otras tecnologías, los beneficios para el sector no dejarán de incrementar.
