La Organización Mundial de la Salud (OMS) acaba de promover un nuevo plan para incentivar la actividad física a nivel mundial. Este nuevo plan muestra las maneras para reducir la inactividad física en adultos y adolescentes en un 15% para el 2030.
El director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, dice textualmente: “mantenerse activo es crucial para la salud. Sin embargo, en nuestro mundo moderno, es un reto cada vez mayor”. Esto lo dijo en la presentación del nuevo Plan de Acción Mundial de la OMS sobre Actividad Física 2018-2030: más personas activas para un mundo sano.
En todo el mundo, uno de cada cinco adultos y cuatro de cada cinco adolescentes (entre 11 y 17 años) no realizan suficiente actividad física. En el 2016, más de 1.900 millones de adultos tenían sobrepeso, de los cuales más de 650 millones eran obesos.
Las Enfermedades No Transmisibles (ENT) como las cardiopatías, los accidentes cerebrovasculares, la diabetes, los diferentes tipos de cáncer, etc., provocan el 71% de todas las muertes en el mundo, entre ellas la de 15 millones de personas entre los 30 y los 70 años.
La actividad física es vital para prevenir las ENT y esto es lo que la OMS quiere cambiar con este nuevo plan de acción mundial. Esta iniciativa les enseña a los países y a sus gobernantes las posibles políticas públicas para reducir la inactividad física en adultos y en adolescentes en un 15% para el 2030, al recomendar un conjunto de 20 medidas normativas que, combinadas, tienen por objeto crear sociedades más activas, mejorando los entornos y las oportunidades para que personas de todas las edades y capacidades dediquen más tiempo a caminar, montar en bicicleta o hacer algún tipo de actividad física.
Esta iniciativa también busca apoyar la capacitación de profesionales en el área de la salud. La OMS hace un llamado al diálogo para que entre todos los actores (sector público, gobiernos, organizaciones de la sociedad civil y academia) definan cuáles son los mejores caminos para disminuir las tasas de obesidad en los países de acuerdo a sus respectivos roles y responsabilidades.
Vemos también cómo aquellos gobernantes o funcionarios públicos más activos con el ejercicio, son también los que más apoyan a sus comunidades en estos aspectos, porque saben de los beneficios que esto implica para toda la sociedad y toman las mejores decisiones sobre las iniciativas y recomendaciones que hace la OMS para prevenir enfermedades.
Queridos lectores, los invito a empezar una rutina de ejercicios de mínimo cinco días a la semana, y así mejorar nuestra calidad de vida para no ser parte de estas estadísticas mortales.
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