MiOriente > MiOriente > Ni el tigre de Sura pudo salvar a la EPS: esta es la historia de la imagen corporativa

Ni el tigre de Sura pudo salvar a la EPS: esta es la historia de la imagen corporativa

  • Este tigre, sin duda, usted lo reconoce. Tiene más de cincuenta años y es el emblema de una compañía que está ad portas de cumplir ocho décadas de actividad. Es su símbolo de acompañamiento, prevención y cuidado. Por eso, es también el tigre menos temido, llegando a ser incluso amigo de los niños en los eventos corporativos.

    El tigre llegó a ser la imagen de la Compañía Suramericana de Seguros Generales (conocida solo como Sura desde 2009) en la década de los setenta. En esa época, una canción popular inspiró a los publicistas Luis Roberto Escobar y José María Raventós para crear el símbolo de la empresa y apostar por una nueva forma de hacer mercadeo en Colombia. La canción era Que me coma el tigre, del compositor Eugenio García Cueto, y les sirvió como punto de partida para diseñar una imagen memorable que vería crecer a la compañía.

  • En ese entonces, el portafolio de servicios de Suramericana era un poco distinto al de la actualidad. La empresa había nacido en Medellín en diciembre de 1944, con una oferta de soluciones a industrias locales para proteger su patrimonio y bienes. Fundada y radicada en la capital antioqueña, en pocos meses, sin embargo, logró ubicar sedes en Bogotá y Barranquilla. Luego, en 1945 ingresó al mercado público de valores, y en 1947 amplió los servicios para ofrecer respaldo a personas naturales, con la creación de Suramericana de Seguros de Vida.

    La llegada del tigre como imagen corporativa en 1972, un año después de la creación de la Fundación Sura, significó entonces una forma de hacer mercadeo en la venta de seguros. De hecho, la empresa cuenta en una reseña que los asesores de seguros de la época usaban la letra de Que me coma el tigre “para responder de forma jocosa a las altas metas del plan de incentivos” que tenían.

    seguros sura corporativo historia tigre 1972.png
    El tigre de Sura en 1972.

    Su propósito fue crear una estrategia para estimular a los asesores a cumplir las metas de ventas. En las primeras piezas apareció un tigre en blanco y negro, de trazos simples, que enseñaba la importancia del cuidado y la prevención de accidentes con ciertas dosis de humor

    dijo Sura.

    Algunas de las piezas publicitarias de aquellos años decían “Suramericana tiene nuevos planes. Mejoran su protección y multiplican sus ahorros. Pregunte por el tigre a un tigre en seguros”; o también: “Deme una cita y yo, un ‘tigre en protección’, le explicaré cómo estar 100 % protegido”.

    historia tigre sura.jpg
    Evolución de la imagen del tigre de Sura.

    Esa fue la primera cara del tigre, allá en los setenta. Sin embargo, para 1978 y en la siguiente década comenzó a cambiar, no solo su imagen —que adquirió color y “expresiones faciales más dóciles y amables”—, sino también sus valores insignia. La mascota institucional empezó a representar amabilidad, seriedad y confianza, y además se perfiló como el tigre que acompaña, previene y cuida.

    Leer más: Rendón y “Fico” culparon al Gobierno nacional por salida de la EPS Sura, ¿qué dijo Petro?

    En los ochenta fue también cuando el tigre se salió del papel y entró a la calle. Por esos años fue confeccionado el primer traje de tigre, un disfraz que era llevado a eventos, convenciones y distintos lugares.

    Con el tiempo, el tigre apareció igualmente en imágenes de avisos y carteles, y más tarde en pantallas, cuando Sura ingresó al sistema de salud en 1990 prestando servicios de medicina prepagada (con la denominación de Susalud), y aún desde el 16 de marzo de 1995, fecha en que recibió su aprobación como Entidad Promotora de Salud (EPS).

    Con cerca de 30 años en ese rol, Sura acaba de presentar este martes una solicitud de retiro ante la Supersalud. De ser aprobada, esta dejaría de existir como EPS, pero la compañía seguirá prestando otros servicios, como lo ha hecho desde su fundación. Uno de ellos es la medicina prepagada, y otro el servicio como aseguradora de vehículos.

    El tigre de Sura no pudo salvar a la EPS, pero continuará siendo la imagen de una compañía con éxito y gran despliegue en el área empresarial.

    Compartir:

  • Relacionadas