Preocupado se encuentra el Gobierno Nacional por la alta probabilidad de que en las próximas semanas se genere una curva negativa de nuevos contagios en el país, debido a la celebración de Halloween que tendrá lugar el 31 de octubre.
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Si bien las autoridades han sido claras en expresar que estarán prohibidas las fiestas y aglomeraciones, lo cierto es que es técnicamente imposible vigilar el comportamiento de todos los ciudadanos en una fecha en la que incrementan los riesgos de contagio del COVID-19.
“Las recomendaciones que salieron ayer del comité asesor son totalmente claras. Primero, no fiestas; de ninguna manera queremos fiestas de adultos o de niños en el entorno de Halloween”, dijo el ministro de Salud y Protección Social, Fernando Ruiz.
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Y es que las evidencias científicas demuestran que, por ejemplo en Europa, las reuniones y celebraciones de este tipo han sido la mayor causa de nuevos contagios. De hecho, Halloween es el escenario perfecto para que se generen “supercontagiadores”, es decir, personas posiblemente asintomáticas que van de un lugar a otro contagiando a otras.
“Si los alcaldes consideran y el territorio presenta situaciones que lo ameriten, podría haber toques de queda en algunas ciudades. Explicando que, siempre, 15 días después de estas situaciones de aglomeración se da un crecimiento en la curva de casos de contagio”, señaló esta cartera.