Todo un drama viven los familiares de las 14 personas heridas que dejó la explosión de un camión repartidor de gas natural comprimido, propiedad de la empresa Botero Soto Soluciones Logística, contratista de EPM.
En diálogo con MiOriente, la señora Adriana María Arcila Cardona, quien junto a su esposo se logró salvar de quedar en medio de las llamas, pero tiene a siete familiares en delicado estado de salud, denunció que el conductor del vehículo, quien lamentablemente falleció en el hecho, iba con exceso de velocidad.
Yo vi todo, ese señor iba volado, perdió el control en esa curva, trató de enderezar el carro y no le dio. Fue una imprudencia impresionante, él se salió del carril, iba corriendo y en una curva de esas tan profunda, mi esposo aceleró la moto en la que íbamos para poder salvarnos
narró.
Doña Adriana hoy pide elevar oraciones para que sus familiares se recuperen. El día del accidente iban en motos y carro para un paseo a San Rafael.
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Ella y su esposo lograron adelantarse al camión antes de que este se volcara, pero en la explosión sí quedaron atrapados su hija de siete años, Angie Celeste; su hijo de 23 años, Braian; así como la novia de su hijo, dos hermanos, una cuñada y una sobrina.
Su hija sufrió graves lesiones en sus dos manos y requiere donaciones de sangre en el Hospital San Vicente Fundación de Medellín, mientras que a su hijo le practicaron una traqueotomía debido a quemaduras en las vías respiratorias.
Recordemos que el conductor del camión era John Fredy Gallego Orozco, de 52 años de edad; quien laboraba en la empresa desde 2009 y en la operación del transporte del gas natural llevaba cuatro años.
Aunque la empresa Botero Soto no se pronunció sobre el presunto exceso de velocidad del conductor, en un comunicado aseguró que el vehículo “era modelo 2020, estaba en óptimas condiciones y con todos los documentos en regla”.
