En la emotiva toma de posesión en que Joe Biden se convirtió en el 46º Presidente de los Estados Unidos de América, había, sin que lo supiéramos, un toque de Colombia. Bueno… para ser más exactos, ese toque de Colombia hacía parte del vestido de la segunda persona más importante del evento: Kamala Harris. Nos referimos al mismo traje que días antes pasó por las manos de una mujer de sangre santuariana.
Hablamos de Jéssica Zuluaga Duque, la hija de una pareja de santuarianos radicados en Bogotá, y quien vive hace tres años en EEUU. Trabaja para Storytellers and Creators, en Nueva York, la misma empresa a la que hace quince días llegó el prestigioso diseñador afroamericano Christopher John Rogers para “hacer un encargo” de altísima importancia.
Entérese: KARLA
“Christopher llegó a nosotros por recomendación con este diseño. Nos dijo que era muy importante, y días después nos contó que era para Kamala Harris; fue súper increíble cuando nos lo contó”, narró Zuluaga a MiOriente.
En efecto, Jéssica hizo parte del equipo que confeccionó el vestido morado que lució, en la ceremonia de investidura de Joe Biden, la que hoy por hoy es la primera mujer en ocupar la Vicepresidencia de la mayor potencia del mundo.
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“El diseño es de Christopher John Rogers. Nosotros nos encargamos fue de toda la creación del vestido. Él nos trajo el diseño y nosotros lo patronamos, lo cortamos, lo
cosimos; lo hicimos real”, agregó.
Jéssica, quien estudió Diseño de Modas en la Academia Arturo Tejada y se especializó en Producción de Modas en Argentina, es hija de los santuarianos Manuel Zuluaga y María Cemelly Duque. Sin embargo, no es la única latina en Storytellers and Creators; a su lado trabajan mexicanos, hondureños, dominicanos, colombianos, etc.
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“Somos una fábrica de lujo, entonces nos encargamos de hacer ropa de alta costura. Hemos trabajado para muchos diseñadores, y nos caracterizamos por hacer muy bien los trajes”, manifestó Jéssica, quien resaltó el significado de que, en su posesión, Kamala Harris haya sido vestida por un grupo de afrodescendientes e inmigrantes.
“Ayer estábamos emocionados, todos pendientes del computador. Cuando ella salió, todos gritamos y saltamos de la emoción porque... es Kamala Harris, la primera mujer vicepresidenta de los Estados Unidos”, dijo.
La última vez que esta mujer visitó El Santuario fue hace dos años; se le hace una eternidad. ¿Por qué? Porque añora su patria, y porque se siente orgullosa de ser latina. Asegura que hay que soñar en grande; Jéssica, como todo santuariano, cree en el trabajo duro y, sobre todo, en el poder del amor por lo que se hace. Jéssica es la prueba fehaciente de que estudiar vale la pena.
