Desde que ocurrió el paro armado del Clan del Oriente en Argelia y Nariño, se develó crudamente la compleja situación en materia de seguridad que atraviesa esa zona del Oriente Antioqueño.
De eso hace ya cerca de un mes, y a pesar de los golpes de las autoridades contra los cabecillas de esa organización delincuencial, e incluso del consejo de seguridad que se realizó en Sonsón con presencia del ministro de Defensa, Iván Velásquez, los habitantes de estos municipios no han vuelto a tener paz.
Es noticia: “No me devolverán a mi mamá”: hija de víctima de accidente por conductor ebrio en la Autopista
Según informó Caracol Radio, se han conocido otros hechos violentos en contra de la población de Argelia, hechos que van desde abusos sexuales y secuestros exprés hasta desplazamientos.
Ese medio conoció que, durante el paro, un grupo de hombres armados llegó hasta una finca en zona rural del municipio, donde intimidaron a un campesino y a su esposa y les exigieron una suma de dinero.
Como no contaban con ella, obligaron al hombre a irse para que consiguiera el dinero en el casco urbano. El campesino salió en pos de lo que le requirieron pero cuando regresó encontró que su compañera había sido abusada sexualmente y los delincuentes se habían marchado.
De acuerdo con la información conocida por Caracol Radio, las víctimas no denunciaron el hecho, y días después los hombres volvieron a cobrar el dinero —el cual no entregaron— y les robaron algunas pertenencias. Tras esto la pareja tuvo que desplazarse, aunque en esta ocasión sí denunciaron los hechos ante las autoridades.
Como este, también han salido a la luz casos de secuestro y robo. Actualmente los habitantes de Argelia temen por su seguridad.