A partir del 1 de enero, los colombianos tendrán que pagar más impuestos. Uno de esos gastos será originado por el pago del Impuesto Nacional al Consumo, que regirá nuevamente en 2023.

Así lo anunció la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales de Colombia (DIAN), al señalar que los negocios que venden comidas y bebidas deberán cobrar a los consumidores un impuesto que equivale a 8 % del total consumido, y lo cobrarán en los establecimientos del país que están inscritos en el Régimen Simple de Tributación (RST).

  • Actualidad: Gobierno nacional busca que incremento de los tiquetes aéreos en 2023 sea solo de un 14 %

    Es decir, los negocios que expenden comida y bebidas, y que se acogieron al beneficio del Gobierno pasado, tienen que actualizar la información del Registro Único Tributario (RUT).

    En el RUT deberán reemplazar la responsabilidad 50 o 57 —que otorga el beneficio de “no responsable del impuesto al consumo” según corresponda su naturaleza jurídica— por la 33, la cual los hace responsables del Impuesto Nacional al Consumo.

    Finalmente, la DIAN recordó que los establecimientos que no cumplan con lo anterior “se verán expuestos a sanciones penales, conforme con lo consagrado en el artículo 402 de la Ley 599 de 2000 (Código Penal)”.