A través de WhatsApp, varios orientales han sido víctimas de una estafa, luego de pretender comprar automóviles y motocicletas del salvamento de una reconocida aseguradora a muy bajos precios; los estafados, después de ser convencidos por el delincuente, consignaban el dinero y, como por arte de magia, este desaparecía.
MiOriente logró hablar con tres de los afectados, los cuales narran el mismo modus operandi por parte de los delincuentes. “Es una conversación de varios días donde se hacen pasar por un asesor, dicen que van a vender más económico, muestran fotos de los vehículos, los involucran diciendo que es una persona que trabaja directamente allá. Daban credibilidad del negocio, una vez se hace la consignación se desaparecen y no vuelven a contestar”, dijo una de los robados, residente del municipio de El Carmen de Viboral.
Y es que el estafador escribía a las víctimas tratando de buscar a otra persona, aduciendo que él era quien le había vendido un carro en días anteriores y que tenía un nuevo negocio; ellos de inmediato reconocían que estaba equivocado, sin embargo, manifestaban que estarían interesados en la propuesta.
“Buenos días, don Carlos, le habla Juan David quien labora con los salvamentos por siniestros. Yo le saqué la moto y el vehículo el mes pasado; le cuento que hay unos salvamentos para ofertar de motos de alto y bajo cilindraje, y también hay vehículos que ingresaron por hurto, no están chocados, por si le interesan. Me cuenta, ¡feliz día!”, ese sería el mensaje de entrada para que los timados cayeran en el juego.
Después de que las personas mordieran el anzuelo, el supuesto asesor ofrecía motos y carros de diferentes cilindrajes a costos muy bajos, enviaba certificados laborales, bancarios y hasta copias de la cédula para constatar que se trataba de una persona real, todo hacía parte de su fachada.
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“Él me mostró un Mazda 2 y quedamos que para negociar con ese carro, al siguiente día quedamos en que él me mandaba la adjudicación del carro para seguir en el proceso. Me mandó el papel, me enredó tanto que terminé consignando sin verme con él”, dijo otro de los estafados.
En total, según los testimonios recolectados, el hombre logró obtener un botín cercano a los 30 millones de pesos, los cuales fueron consignados a cuentas bancarias que aún están siendo investigadas para identificar al criminal.
La operación del bandido no es reciente, en el mes de noviembre de 2020 un ciudadano de La Unión fue contactado por unos conocidos, quienes también fueron engañados bajo la misma modalidad, hacerse pasar por el empleado de la compañía comercializadora de los vehículos. “Yo empecé a ver la cosa como negativa, llamé a los muchachos y ellos me dijeron que habían recibido una llamada diciendo que tenían un negocio de unas motos, así empezó todo y qué tumbada nos pegaron”, expresó otro de los engañados.
Todas las víctimas acudieron a las autoridades y a las entidades bancarias con el fin de encontrar respuesta ante el evidente delito, sin embargo, ninguno de los timados ha recibido una respuesta contundente y menos la devolución del dinero transferido.
