En Antioquia 391 familias han logrado fortalecer sus capacidades y condiciones de sostenibilidad, a través de la unión de conocimientos, recursos y metodologías de un grupo de fundaciones empresariales y familiares, que creen y le apuestan al trabajo colectivo como una forma de aumentar el impacto y aportarle al desarrollo integral de las comunidades rurales.
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Precisamente, Siete Vueltas (San Juan de Urabá) y El Prodigio (San Luis) son comunidades que han pasado por un proceso de fortalecimiento y educación en proyectos de desarrollo económico, social y ambiental desde sus familias, para luego gestar y liderar de manera autónoma procesos de transformación.
Estos procesos han tomado tiempo, han sido 4 años de trabajo en los territorios, donde se priorizó con la base social, se trabajó en el fortalecimiento de líderes empoderados y grupos organizados para la autogestión generando un modelo de desarrollo sostenible de cara al propósito superior: comunidades y familias sostenibles
expresó la Alianza para el Desarrollo.
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Este año, la Alianza llega a un nuevo territorio (Dabeiba) con dos nuevas aliadas —fundaciones Sura y Sofía Pérez de Soto—, con quienes replicará el modelo de generación de capacidades y condiciones a partir de las potencialidades territoriales, las cuales se identificarán en un diagnóstico participativo comunitario.
Las fundaciones que le han apostado a esta puesta en común son Aurelio Llano Posada, Bancolombia, Bolívar, Davivienda, Celsia, Conconcreto, EPM, Éxito, Fraternidad Medellín, GreeLand, Grupo BIOS, Grupo Familia, Haceb, Pintuco, Proantioquia, Saldarriaga Concha, Sofía Pérez de Soto, Sura, Unibán, United Way y la Asociación de Fundaciones Familiares y Empresariales de Colombia (AFE).
