La situación en torno al COVID-19 en el departamento no mejora de manera contundente, y este tercer pico ha revelado el ámbito más crudo de la pandemia, dejando cientos de contagiados por día y decenas de fallecidos a causa del virus.
En la mañana de hoy, el gobernador (e) Luis Fernando Suárez estuvo reunido con el Gobierno Nacional, evaluando el estado actual de las cifras y adoptando nuevas medidas restrictivas para hacer frente a las adversas circunstancias que atraviesa el territorio, esto sumado a las jornadas de manifestaciones que se desarrollan a nivel nacional y donde el departamento se ha visto involucrado por el accionar de la ciudadanía.
Durante cuatro semanas consecutivas se vienen aplicando en el departamento distintas medidas restrictivas, las cuales han sido sometidas a un proceso de evaluación por parte de las autoridades para determinar si son o no efectivas.
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Así, se ha estipulado que entre el 3 y el 9 de mayo las medidas que regirán en todo el departamento serán: toque de queda nocturno y ley seca desde el martes 4 hasta el jueves 6 de mayo entre las 8 p.m. y las 5 a.m. de cada día, pico y cédula el martes 4 (0-1), miércoles 5 (2-3), jueves 6 (4-5), viernes 7 (6-7), sábado 8 (8-9), domingo 9 (0-1) y lunes 10 de mayo (2-3), y, finalmente, cierre total desde el viernes 7 de mayo a las 8 p.m. hasta el lunes 10 de mayo a las 5 a.m.
Además, el toque de queda nocturno aplicará, igualmente, para el lunes 10 a partir de las 8 p.m. e irá hasta el martes 11 de mayo a las 5 a.m.
Actualmente, el territorio antioqueño cuenta con 19.224 casos activos de COVID-19 distribuidos en los 125 municipios del departamento. En cuanto a la ocupación de camas UCI, se reporta un 98.77%, según los datos entregados por el Centro Regulador de Urgencias y Emergencias regional (Crue) y el Ministerio de Salud.
Se espera que en las próximas horas sea expedido el Decreto Departamental que deja en firme estas medidas.
