El Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz) publicó el informe sobre la presencia de grupos armados en el país durante el 2020. Según el registro de la ONG, el año pasado el Clan del Golfo -también conocido como las AGC- habría operado en siete municipios del Oriente Antioqueño.
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La información que llevó al Instituto a concluir que hubo injerencia de este grupo ilegal en Rionegro, San Luis, Cocorná, Sonsón, Nariño, La Unión y San Francisco la ofrecieron organizaciones de derechos humanos, la Defensoría del Pueblo, la Fiscalía General de la Nación y medios de comunicación.
Dentro de la información que nosotros verificamos, podemos ver que hay presencia de las AGC en esta zona. El Gobierno no las reconoce porque muchas veces esa participación se da por tercerización
explicó Juana Valentina Cabezas, investigadora de Indepaz.
Es decir, a juicio de la ONG, en el Oriente hizo presencia el Clan del Golfo a través de la contratación de estructuras criminales de menor tamaño para promulgar, con otros nombres, sus acciones delincuenciales. En particular, “en operaciones de pequeños grupos integrados entre cinco y quince individuos”, se lee en el informe.
Economías ilegales
De esta manera, debajo de la sombrilla del Clan del Golfo estaría, por ejemplo, el Clan del Oriente, grupo delictivo del que se tiene rastro desde el 2019 y, según fuentes de inteligencia de la Policía recolectadas por El Colombiano, hace presencia en 8 municipios de la subregión.
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Indepaz reconoce que, en su mayoría, estos grupos no actúan bajo alguna convicción política o un ideal, tal como ocurrió con las extintas FARC-EP. Sus objetivos están centralizados en la maximización de la siembra, producción y venta de estupefacientes.
Se movilizan allá [al Oriente] con un entramado muy grande que busca unir todas las partes que ellos tienen separadas: el Urabá, Bajo Cauca y el Oriente. Se está dando en una expansión por diferentes municipios hasta llegar al Magdalena.
agregó la investigadora del Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz.
Esa acción les permite a los grupos ilegales construir una línea para transportar los negocios que surten sus economías ilegales: como el oro, el narcotráfico, tráfico de armas y personas, entre otras.
La participación del Clan del Golfo en la subregión podría estar relacionada con el aumento de los cultivos y laboratorios de coca. Si bien en el 2020 el Ministerio de Justicia solo reportó siembras en San Luis y San Francisco, fuentes le confirmaron a MiOriente que las producciones se extienden hasta las montañas de otros municipios.
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Los investigadores creen que probablemente en el Oriente están manejando -como pasa en otras zonas del país- negocios que en su mayoría tienen que ver con economías que parecen legales.
Como apuestas, loterías, prostitución, préstamos de dinero gota a gota y contratación de sicariato y amenazas
concluyó Juana Valentina Cabezas.
Homicidios
Con base en información suministrada por la Policía Nacional, el incremento de los homicidios en la subregión, principalmente en La Unión, Sonsón, San Rafael y San Luis, involucran a los grupos delincuenciales que hacen presencia en esos territorios.
Cabe resaltar que la institución no le adjudica directamente las muertes al Clan del Golfo, pero sí a Los Mesa y a El Clan del Oriente, organizaciones que tendrían alianzas con las AGC.
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Precisamente, frente al orden público, los alcaldes de San Rafael y San Luis han reiterado su preocupación por la presencia de estos grupos, incluso alertan sobre el déficit que hay en las unidades de la Policía que atienden sus localidades.
Hay veces que nos acostamos cuidados por tres policiales. Nosotros hemos sido muy cercanos a la fuerza pública, pero muchas veces las dificultades pasan porque no hay recursos humanos
planteó Henry Suárez, alcalde de San Luis.
El estudio de Indepaz también revela el listado de municipios donde ocurrieron acciones por disputa o consolidación de los grupos “narcoparamilitares” durante el 2008 y 2020. Allí aparecen mencionados Rionegro, San Luis, El Carmen de Viboral, La Ceja, Sonsón, San Francisco, San Carlos, Nariño y Cocorná.
MiOriente contactó al Ministerio de Defensa y a la Secretaría de Seguridad y Justicia de Antioquia para contrastar el informe, pero a la hora de publicar este reporte no recibió respuesta.
