Como un “verdadero milagro” describieron los usuarios de la autopista Medellín-Bogotá que, esta mañana, se salvaron de morir aplastados por una enorme roca que cayó desde la parte alta de una montaña en jurisdicción de San Luis, sector Filo de Hambre.
Un bus de Coonorte habría sido impactado levemente por la roca en la parte de la cabina, además del material vegetal que también se desprendió.
“Vean pues la medio roquita que cayó, pasó sobando el bus, partió la carretera en dos”, dijo uno de los testigos que se salvó y quien a esta hora sigue represado en la carretera que permanece cerrada.