Desde sus 23 centrales de generación de energía hidráulica y una térmica, EPM mantiene iniciativas que contribuyen a mitigar los impactos de variabilidad climática y reducir los riesgos asociados, en este caso, a las condiciones del fenómeno de El Niño.
Todas estas acciones se realizan de manera articulada con los demás actores del sector eléctrico, indicaron desde EPM.
John Maya Salazar, gerente general de EPM, indicó que “la seguridad energética y la seguridad hídrica son los pilares de las estrategias y las inversiones que estamos desarrollando hace varios años, con el propósito de que nuestros sistemas sean cada vez menos vulnerables, contribuyan al desarrollo del país, el bienestar de la comunidad, y respondan de manera efectiva ante eventos como el fenómeno de El Niño”.
Ante la necesidad de tener reservas de agua suficientes en los embalses a nivel nacional, fue necesaria una mayor generación térmica para atender la demanda desde el segundo semestre de 2023. Los costos de la generación térmica son elevados, pues dependen de los precios de los combustibles que usan: carbón, gas natural importado o diésel, lo cual ha implicado que el precio de bolsa se incremente para remunerar esta operación.
Contenido relacionado: La CREG aprueba nueva normativa para estabilizar precios de la energía durante el fenómeno de El Niño
“Como estrategia para responder al trimestre más crítico de este fenómeno, desde mayo de 2023, EPM mantuvo la meta de llevar los embalses al 80 % de volumen útil a diciembre del mismo año, lo que hoy permite tenerlos en condiciones adecuadas para generar energía en el primer trimestre de 2024, período que se considera más crítico por la temporada seca y su intensificación por El Niño”, explicó Alberto Mejía Reyes, gerente de Mercado de Energía Mayorista de EPM.
La entrada de las unidades 3 y 4 de la central Hidroituango contribuyó a una reducción cercana al 40 % en el precio de bolsa a partir de noviembre de 2023, atendiendo alrededor del 10 % de la demanda nacional con sus 1.200 megavatios (MW) de capacidad, a pesar de la baja hidrología por efecto del fenómeno de El Niño.
Comportamiento de los embalses
Hoy, los tres embalses que abastecen el 94 % del sistema de acueducto de EPM (Riogrande II, La Fe y Piedras Blancas) presentan reducción en sus niveles, con tendencia a continuar descendiendo.
Esta situación, que todavía no genera alertas por desabastecimiento de agua, sí podría provocar eventos de color en el agua en gran parte del Valle de Aburrá, pues en la medida en que bajan los niveles de los embalses la captación debe ser a una profundidad donde se hallan mayores concentraciones de manganeso.
Pese a que las cinco plantas que reciben agua de embalses continuarán entregando agua potable con todos los estándares de calidad, es posible que no se remueva completamente el color que aporta el manganeso.
Aplicación medida de la CRA por consumo excesivo de agua
Con el propósito de sumar medidas para contrarrestar los impactos del actual fenómeno de El Niño en el territorio nacional, la Comisión de Regulación de Agua Potable y Saneamiento Básico (CRA) expidió la resolución UAE-CRA 39 de 2024, por medio de la cual se activa la medida para desincentivar el consumo excesivo de agua potable, establecida en la resolución CRA 887 de 2019, compilada en la resolución CRA 943 de 2021.
La activación de esta medida busca disminuir los consumos excesivos de agua potable y los responsables de aplicarla son los prestadores del servicio público domiciliario de acueducto: consiste en aplicar un cobro adicional a los consumos (medidos en metros cúbicos) que estén por encima de lo establecido como “consumo excesivo”, según el piso térmico en el que esté ubicado el usuario.
De la medida de la CRA quedan exceptuados los inquilinatos, entidades sin ánimo de lucro a las que se les presta servicio especial y multiusuarios del servicio público domiciliario de acueducto, hogares comunitarios de bienestar y sustitutos, y usuarios de las áreas comunes de los inmuebles residenciales bajo el régimen de propiedad horizontal.
Los recursos provenientes de la aplicación del desincentivo serán recaudados por los prestadores y girados al Fondo Nacional Ambiental (Fonam).
En el caso de EPM, la empresa ya realizó el análisis de la aplicación de esta medida en cada uno de los subsistemas que abastecen el Valle de Aburrá y Rionegro, contrastando la disponibilidad de agua con la demanda, y definió que inicialmente el cobro adicional, a partir de los metros cúbicos fijados en la resolución de la CRA, solo debe aplicarse a los subsistemas de acueducto de Barbosa, Caldas y San Cristóbal.
Esto aplica a los consumos residenciales realizados desde el 29 de enero pasado e incluye a los usuarios de agua prepago de los sectores indicados.
La invitación nuevamente es a hacer un uso responsable del agua y la energía. Con pequeñas acciones y compromisos se suma al propósito de mitigar los efectos del fenómeno de El Niño.