En una operación conjunta entre la Policía Nacional y la alcaldía de Medellín, se logró desmantelar la estructura criminal conocida como “La Viña”, dedicada al hurto de relojes Rolex y joyas de alto valor en la ciudad y sus alrededores.
Esta banda tenía como objetivo principal a turistas y empresarios provenientes de Panamá, México y Miami, quienes llegaban al aeropuerto José María Córdova.
Gracias a las denuncias presentadas por ciudadanos nacionales y extranjeros, la Seccional de Investigación Criminal (SIJIN) de Medellín inició una investigación que se extendió por 12 meses. Durante este tiempo, se logró identificar la forma en que operaba la banda, que seleccionaba a sus víctimas en bares, gastrobares, y en las inmediaciones del aeropuerto. Simulando accidentes de tráfico tras el Túnel de Oriente, los delincuentes interceptaban a sus víctimas, las amenazaban con armas de fuego y les robaban joyas y dinero en efectivo.
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La operación culminó con la captura de siete personas mediante órdenes judiciales y la imputación de cargos a dos más, quienes ya se encontraban en centros carcelarios. Los capturados enfrentan cargos por concierto para delinquir y hurto calificado y agravado.
Entre los elementos incautados durante las diligencias de registro y allanamiento en las comunas de Aranjuez, Manrique y Villa Hermosa, se encuentran 19 tarjetas de crédito de diferentes bancos, dos proveedores de armas, cuatro proyectiles calibre 38, un control universal, dos tarjetas de propiedad de vehículos y una camioneta de alta gama, utilizada para identificar a las víctimas.
Una de las capturas más destacadas fue la de alias “Pamplona”, presunto líder de la banda, quien coordinaba los robos y seleccionaba los perfiles de las víctimas. Según la investigación, esta estructura criminal no solo operaba en Medellín, sino también en Bogotá, Cartagena, Norte de Santander, Santander, Quindío, Risaralda y Caldas, con robos que podrían ascender a 700 millones de pesos en objetos de alto valor.
El análisis de 23 cámaras de vigilancia fue clave para desmantelar la banda, que había operado durante años en la zona nororiental de Medellín. El alcalde Federico Gutiérrez Zuluaga destacó la importancia de este golpe: “Sacar de circulación a estos criminales traerá un gran beneficio para que los ciudadanos puedan estar tranquilos”.
Además, la Policía Nacional invitó a la comunidad a seguir denunciando actividades delictivas que afecten la seguridad y el patrimonio de los ciudadanos.
