Tuvieron que pasar más de 16 mil noches para que María Fanny y Martha Deyanira se volvieran a abrazar. Hasta el viernes 17 de septiembre, el rostro de Deyanira estuvo colgado en el Salón del Nunca Más de Granada.
A muy temprana edad ella desapareció de un momento a otro. Desde entonces, la esperanza de encontrarla con vida era un sueño incompleto que iba y venía.
Gracias a una publicación de Facebook, una de las habitantes de Granada reconoció a Deyanira, quien, a pesar de la distancia y de no tener indicios del paradero de su madre y hermana, siempre tuvo el anhelo de reencontrarse con las suyas.
Yo vi la publicación a las doce de la noche y no lo podía creer, pensaba que esa foto era muy parecida a la que estaba en el Salón del Nunca Más
contó Gloria Quintero, enlace de la Corporación Región en Granada.
El encuentro lo gestionó la Corporación Región con el proyecto Memorias de la Ausencia, patrocinado por el Fondo Noruego que hoy, como si fuera un sueño, volvió a unir a una familia que separó la violencia.
Este reencuentro es un espacio de vida y es el propósito central de este proyecto, porque la búsqueda de nuestros seres queridos no debe ser solitaria sino solidaria
dijo Leonor Restrepo, coordinadora del proyecto Memorias de la Ausencia.
Con un abrazo que se prolongó por varios minutos, ambas hermanas se permitieron conocer las vidas que formaron en medio de la incertidumbre. Hubo una larga conversación y actos simbólicos que guardan en su intimidad.
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