Según el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (IDEAM), octubre será el mes en el que se presentarán las lluvias más fuertes de la segunda ola invernal del año, misma que se extenderá desde los próximos días hasta mediados de noviembre.
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Este cambio abrupto del clima en la región implicará un incremento en el número de casos de enfermedades respiratorias, y por ese motivo el Ministerio de Salud y Protección Social entregó una serie de recomendaciones para prevenirlas.
El gran pico epidémico irá descendiendo poco a poco hasta finales de noviembre o incluso hasta las primeras dos semanas de diciembre. De hecho, los menores de cinco años son la población más propensa a contraer los 21 virus respiratorios que circulan en el ambiente.
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“Como tenemos la pandemia del Coronavirus es muy fácil perder la percepción de otros síntomas respiratorios, y por eso es tan importante que mantengamos las medidas que actualmente tenemos para el COVID-19”, dijo Claudia Cuéllar, directora (e) de Promoción y Prevención del ministerio.
Aquí algunas recomendaciones:
- Uso permanente de tapabocas que cubra nariz y boca.
- Distanciamiento físico.
- Lavado constante de manos con agua y jabón.
- Consumo abundante de agua y alimentos que fortalezcan el sistema inmunológico.
- Limpieza y desinfección de superficies.
- No llevarse las manos a ojos, nariz o boca.
- Salir de casa preparados con elementos de protección personal suficientes para hacer cambio de estos, si es necesario.
- Cargar paraguas, impermeables y abrigos que ayuden a protegerse de la lluvia y los cambios abruptos de temperatura.
“Para los menores de cinco años, si hay tos, labios morados, hundimiento de costillas, temperatura de 38 grados de difícil manejo y persistente por más de dos o tres días, y no se puede controlar con antipiréticos, se debe acudir al servicio médico de manera inmediata”, indicó MinSalud.
