De acuerdo con los resultados de una encuesta aplicada por la Cámara de Comercio del Oriente Antioqueño en el mes de agosto, más de la mitad de los empresarios de la subregión no aumentaron sus ventas en los seis primeros meses del año, en relación con las que tuvieron en el 2020.
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En el sondeo participaron 101 empresas que están registradas en la Cámara y solo 40 expresaron que sus ventas aumentaron, 34 las mantuvieron en un índice similar y 27 comentaron que los ingresos disminuyeron frente al año pasado.
El Oriente va muy bien en la recuperación económica, pero todavía falta que la economía se termine de estabilizar y comience su senda de crecimiento natural
dijo Duván Correa, funcionario de la CCOA.
Para Lucía López, empresaria de La Unión, la venta de electrodomésticos ha disminuido en los últimos meses porque “la gente quiere invertir en otras cosas como la ropa, viajes, o simplemente no compran porque no tienen plata".
Pese al panorama, el 68,3 % de los encuestados afirmaron tener expectativas para lo que resta del año, pues esperan que las ventas vuelvan a retomar su estabilidad y se equiparen a las que tuvieron en el 2019.
El Oriente Antioqueño es una región resiliente y con todas las potencialidades para salir adelante
agregó la CCOA.
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El uso de estrategias para el fortalecimiento de las empresas y la capacidad de reinventarse a diario podrían mostrar, de acuerdo con los investigadores, el camino para la recuperación económica.
Y es que a pesar de las restricciones que hubo en el 2020, la economía del Oriente se sostuvo. Según el DANE, la subregión le aportó el 9,5 % del Producto Interno Bruto (PIB) al departamento. Esa cifra ubicó al Oriente en la segunda casilla del balance económico de Antioquia; es decir, después del Valle de Aburrá, fue la región que mayor porcentaje registró.
