En el Día de la Memoria y la Solidaridad con las víctimas del conflicto armado MiOriente rinde homenaje a un marinillo quien murió en extrañas circunstancias en Medellín.
Desde hace tres años la Ley de Víctimas y Restitución de Tierras determinó que cada 9 de abril se honre la memoria de las víctimas del conflicto armado colombiano. Pero conflicto no es solo aquel que se da entre el Estado y los grupos al margen de la ley que fundan su lucha en diferentes corrientes ideológicas. Conflicto también es el que se da cada día en las ciudades, motivado por factores como el narcotráfico, le extorsión, el fleteo, entre otros.
Hace un año, casualmente el 9 de abril, en una cancha de la comuna 13 de Medellín, fue hallado muerto Edison Hoyos Montes, un joven de 20 años que nació en Marinilla y que entonces vivia y trabajaba en Medellín. Viajaba al municipio del Oriente en sus días libres para compartir con su pequeña hija de tan solo 1 año.
Hoy, cuando en su aniversario casualmente se conmemora el Día Nacional de la Memoria y Solidaridad con las Víctimas del Conflicto Armado, su hermana Nancy, desde España, escribió esta reflexión que quiso compartir con la ciudadanía:
“Hoy se cumple un año del fallecimiento de Edison Hoyos Montes, un joven de tan solo 20 años con toda una vida por delante, humilde, trabajador y lleno de ganas de vivir. Aquel fatídico día, un ser inhumano obnubilado por la violencia le arrebató la vida sin razón, y con ella se llevó sus ilusiones y esperanzas, le quitó la oportunidad de ver crecer a su hija y de hacer realidad sus sueños. A sus familiares nos ha dejado sumidos en el más terrible dolor, entre lágrimas, llanto y desolación.
Los suyos seguimos como hace un año: ni olvidamos, ni aceptamos lo sucedido. Nuestras vidas nunca volverán a ser las mismas. Sabemos que debemos seguir adelante pero sin él parece algo inconcebible. Siempre estará presente en nuestros corazones, guardamos de él los mejores recuerdos, los mejores momentos y, por supuesto, conservamos en nuestra memoria la imagen de su sonrisa y su mirada llena de vida. Es imposible expresar con palabras el dolor tan profundo, tan desgarrador, tan indescriptible que sentimos. Nadie debería pasar por algo así.
Tristemente el de Edison, no fue el primero ni será el último, pues muchas personas mueren en Colombia por causa de la violencia y la delincuencia que ensombrece el día a día. Cientos de historias que se repiten, y al terrible dolor que acompaña nuestras vidas se suma la impotencia e indignación por la injusticia, la indiferencia y la impunidad en la que quedan estos crímenes. Nunca sabremos si realmente “se investigó”, o si simplemente es un expediente más para la justicia colombiana, pues la mayoría de casos se quedan sin resolver.
Todos conocemos la difícil situación de la comuna 13 de Medellín, con un incremento de niños y jóvenes que se unen a las bandas criminales y el temor con el que viven los propios habitantes de la zona. Es una problemática social compleja que requiere una intervención inmediata para que cese la violencia en este sector.
Sus familiares no queremos que su memoria, ni la memoria de tantas víctimas de la violencia en Colombia, se vaya al olvido; por eso hoy, en el primer aniversario de su muerte, hacemos un llamado a todos los colombianos y a las autoridades para que continúen su lucha contra la violencia.
Parece que nos hemos acostumbrado a escuchar estos sucesos y a vivir con ellos en el día a día; nunca creemos que nos puede tocar a nosotros. No debemos volvernos insensibles, digamos NO a la violencia, NO a la indiferencia y NO a la impunidad.
Edi, "tu familia que tanto te ama nunca te olvidará”.
