En la plaza de mercado de Rionegro, y en el municipio de Marinilla, se llevó a cabo un control sanitario sobre la venta de pescado, por parte de la Policía Ambiental y Ecológica, con el objetivo de garantizar que cumpla con los parámetros establecidos por la Ley 9 de 1979 y los decretos municipales pertinentes. Según palabras del subintendente Robinson Pulgarín, encargado de la inspección, “este control se realizó para asegurar que el pescado ofrecido a la comunidad cumpla con las condiciones de higiene y seguridad alimentaria necesarias”.
Durante la inspección, en Marinilla se incautaron un total de 10 kilogramos de pescado que no cumplían con las normativas establecidas. Según lo expresado por el subintendente Pulgarín, “estos productos se encontraban a temperatura ambiente y no garantizaban la cadena de frío necesaria para su conservación, lo que representa un riesgo para la salud pública”. En consecuencia, “se procedió a la disposición final de estos alimentos, que incluyó su destrucción o disposición en el relleno sanitario del municipio”, añadió el subintendente.
Por otra parte, en la Plaza de Mercados La Galería, ubicada en Rionegro, la Policía Ambiental no encontró ninguna anomalía o irregularidad en los puntos de venta de este producto.
Entérese: Petro felicitó al gobernador por blindar la “vaca”; Andrés Julián le dijo que esta sigue firme
Es importante destacar que se encontraron algunas especies de pescado, como mojarra, blanquillo y carpa, provenientes del río Magdalena. Sin embargo, según indicó el subintendente Pulgarín, “se recomienda a la comunidad consumir pescado en establecimientos reconocidos y verificar que cumpla con los estándares de frescura y conservación adecuados, especialmente durante la Semana Santa, para prevenir enfermedades o intoxicaciones alimentarias debido a la descomposición”.
De igual manera, estas son algunas recomendaciones que puede seguir a la hora de comprar pescado:
- Observe la apariencia del pescado: busque pescados que tengan una apariencia fresca y brillante. La piel debe ser firme y estar libre de manchas o decoloraciones. Además, los ojos deben ser claros y saltones, no opacos.
- Olor fresco del mar: el pescado fresco debe oler a mar, no a pescado fuerte o desagradable. Evite comprar pescado que tenga un olor fuerte y penetrante, ya que podría ser una señal de descomposición.
- Verifique la textura de la carne: la carne del pescado fresco debe ser firme al tacto y rebotar cuando se presiona ligeramente. Evite aquellos que tengan una textura viscosa o pegajosa, ya que podría ser un signo de deterioro.
- Pregunte sobre la procedencia y frescura: interactúe con el vendedor y pregunte sobre la procedencia del pescado, así como la fecha de captura o de llegada al mercado. Los pescados locales suelen ser más frescos y tienen menor tiempo de transporte.
- Observe el estado de las agallas y las branquias: las agallas deben ser de un color rojo brillante o rosa pálido y estar libres de moco o mucosidad. Las branquias deben ser de un color rosado o rojo intenso, no marrón o grisáceo.
- Evite los pescados congelados y descongelados repetidamente: prefiera el pescado fresco siempre que sea posible. Evite los pescados que hayan sido congelados y descongelados repetidamente, ya que esto puede afectar su calidad y sabor.
- Compre en lugares de confianza: compre el pescado en establecimientos de confianza y que cumplan con las normativas sanitarias adecuadas para garantizar la frescura y la calidad del producto.
- Transporte adecuado: si el pescado va a ser transportado durante un tiempo prolongado, asegúrese de mantenerlo refrigerado y en recipientes con hielo para preservar su frescura.
Ingresa al canal de WhatsApp de MiOriente https://whatsapp.com/channel/0029Va4l2zo3LdQdBDabHR05