El diputado ecologista Rasmus Hansson, uno de los tres corporados de Los Verdes en el Parlamento de Noruega, postuló al presidente Gustavo Petro al Premio Nobel de la Paz, el cual se entrega cada 10 de diciembre.
Defendió su postulación asegurando que “Petro promueve una política de paz creadora, moderna e integral. Él muestra en la práctica que el diálogo con los actores armados puede ser un medio eficaz para solucionar conflictos y reducir la violencia”.
El presidente de Colombia reaccionó diciendo: “Agradezco a Rasmus Hansson que me haya nominado al Premio Nobel de la Paz. Seguiremos con todo lo que tenemos por la paz”.
Es noticia: Ideam: volvieron las lluvias, pero por pocos días
Lo cierto es que dicha postulación causó una enorme división en el país, lo mismo que ocurrió en 2016 cuando Juan Manuel Santos consiguió este premio.
La congresista del Centro Democrático, María Fernanda Cabal, dijo: “Desde el 7 de agosto de 2022 van 137 masacres con 465 muertes. Desde su elección 262 asesinatos de líderes sociales. En seis meses de negociación con el ELN, los terroristas ejecutaron 35 secuestros y 43 homicidios. ¿Nobel de paz?”.
Según el testamento de Alfred Nobel, el magnate sueco que instituyó los premios que llevan su nombre desde 1901, las postulaciones pueden ser públicas o secretas. Las que se hacen en secreto se conocen 50 años después de entregarse el premio.
Para este año, algunos de los nominados públicamente son el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, y las organizaciones de derechos humanos B'Tselem (israelí) y al-Haq (palestina).
La activista iraní Narges Mohammadi fue la ganadora del Nobel de Paz 2023 por su defensa de los derechos de las mujeres en el país persa.