El Ministerio de Ambiente de Colombia ha anunciado la actualización del listado de especies en peligro, con un total de 2.103 especies de plantas y animales amenazadas, incluyendo la emblemática palma de cera, el árbol nacional del país. Esta cifra incluye 806 especies nuevas que se suman a la lista previa.
La actualización de la lista publicada en 2017 fue realizada mediante un proceso técnico y científico, en colaboración con diversos actores como institutos de investigación, universidades, asociaciones y expertos en la materia.
La ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Susana Muhamad, resaltó la importancia de este listado actualizado, que refleja un mayor conocimiento de la biodiversidad colombiana y permite la adopción de medidas necesarias para su conservación.
Entre las especies amenazadas se destacan el tití cabeciblanco, el pez sierra, la tortuga del río, el manatí amazónico y del Caribe, el bagre, la turpial real, la rana saltona de Villavicencio, la salamandra y la rana arlequín, entre otras. Se señala que un alto porcentaje de anfibios, el 93,8 %, está en riesgo de extinción.
Entérese: Alarmante panorama: 10 especies emblemáticas están en peligro de extinción en Colombia este año
Las principales amenazas identificadas para estas especies incluyen la deforestación por actividades agrícolas y mineras, la contaminación, el desarrollo urbano, la densidad poblacional y la disminución de los humedales.
El informe también revela que Colombia cuenta con 465 especies en peligro crítico, 801 en peligro y 837 vulnerables. Además de la palma de cera, otras especies de flora en riesgo incluyen la guasca, el cerezo, el carreto, la flor de mayo, la papaya de monte, el roble negro y el frailejón cabrera, entre otras.
La palma de cera, declarada árbol nacional en 1985, es emblemática por su longevidad y altura, alcanzando hasta 60 metros. Aunque se asocia principalmente con el departamento del Quindío, también se encuentra en otros lugares como Cundinamarca.
Este esfuerzo de actualización del listado de especies amenazadas es fundamental para la conservación de la biodiversidad colombiana y para tomar medidas efectivas que aseguren la protección de estas especies en riesgo.
