En las últimas horas, la Asociación Colombiana de Universidades (Ascun), que agremia a instituciones de los dos sectores (público y privado), indicó que hay riesgo para las cerca de 220 universidades del país, a raíz del impacto que podría tener el nuevo programa de gratuidad en las matrículas de las instituciones de educación superior (IES) públicas.
Según Ascun, las universidades no estatales están evidenciando una disminución o baja de estudiantes nuevos, lo cual puede motivar el aumento en la deserción, puesto que los beneficios están dirigidos solo a las oficiales.
Hasta el momento se ha conocido que, para el programa de gratuidad, el Gobierno destinó $2,8 billones que provendrán de recursos del Presupuesto General de la Nación y de las vigencias futuras de Generación E, programa anterior. Al respecto, el presidente Petro anunció que se mantendrá la financiación de los beneficiarios aprobados hasta la duración del programa académico que están cursando.
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Precisamente, la meta del Gobierno con el nuevo programa es pasar la tasa de cobertura de educación superior de 53 % a 62 %. Por lo tanto, el objetivo puntual es incrementar el número de matriculados en 500.000 durante la administración de Gustavo Petro.
Sin embargo, diversos dirigentes han manifestado que otra de las críticas al nuevo programa de gratuidad, es que las nuevas medidas podrían terminar beneficiando más “a los ricos” del país que podrían ingresar a las universidades públicas sin pagar nada y les quitarían cupos a estudiantes con más necesidades económicas.
En conclusión, Ascun reitera que el programa de gratuidad podría generar una disminución o baja de estudiantes nuevos, o incluso, puede motivar el aumento en la deserción.
Es de resaltar que del total de estudiantes registrados en el segundo semestre de 2022, el 54 % se encontraba en las instituciones oficiales y el 46 % restante en las no oficiales.