Tras un trabajo aplicado durante seis años por parte del Grupo de Investigación Síntesis y Biosíntesis de Metabolitos Naturales, adscrito a la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales, el pasado 31 de marzo la Superintendencia de Industria y Comercio le concedió una nueva patente de invención a la Universidad de Antioquia.
El grupo de investigación desarrolló un compuesto que se asemeja a un “chicle fluorescente”, el cual facilita la detección de metales como mercurio y estaño en diversos ambientes líquidos.
Con este se pueden agilizar los estudios toxicológicos y el análisis de fuentes hídricas afectadas por la minería ilegal.
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Como especificó el periodista Carlos Olimpo Restrepo en una publicación de la Udea, “Colombia es el país del mundo con más emisiones de mercurio por habitante y es el tercero donde más se registra contaminación por este metal. La minería ilegal de oro es la mayor causante de este problema, que afecta sobre todo fuentes de agua, según una advertencia de la Procuraduría General de la Nación en enero pasado”.
De esta manera, el compuesto que le dio a la UdeA esta nueva patente es un aporte de gran valor para realizar los estudios toxicológicos a las fuentes de agua contaminadas.
León Felipe Otálvaro Tamayo, docente del Instituto de Química y director del grupo de investigación, aclaró que la patente es una, pero que para la identificación de cada uno de esos metales —mercurio y estaño— se deben usar fórmulas diferentes. “Son dos compuestos de recetas similares, pero no iguales”, insistió.
Por su parte, Julián Barrera, uno de los investigadores, anotó que “Es algo que es muy importante en Colombia, que es un país muy afectado por la minería ilegal, en la que se usa mercurio. Habrá que esperar en desarrollos posteriores en cuáles otros campos se puedan emplear”.
La Universidad de Antioquia cuenta en la actualidad con 114 patentes concedidas a 25 grupos de investigación, 57 de ellas nacionales y otras 57 internacionales. De estas, el 48 % están relacionadas con aplicaciones para la industria y los materiales, el 35,4 % con las ciencias de la vida y el 10,6 % con energía y minería, según Innovación UdeA.
