En La Ceja avanza la estructuración de uno de los proyectos ambientales más importantes en la historia del país. Se trata de la Planta Industrial de Almacenamiento y Transformación de Residuos, PIATRS, una solución para más de 200 años del problema general de los rellenos sanitarios que tienen los municipios.
Lea también: En la plaza de mercado de Rionegro asesinaron a un hombre y uno más quedó herido
Con la PIATRS, que entraría en operación entre abril y mayo de 2023, La Ceja se convertirá en el único municipio de América Latina en reemplazar los tradicionales rellenos sanitarios al aire libre que generan una alta contaminación de las aguas y el aire, por una planta temporal de almacenamiento donde se producirá combustible con los residuos.
Según explicó EE. PP., el proyecto consiste en enfardar y embalar los residuos de manera temporal durante ocho años; de ellos se obtiene combustible que reemplazará el carbón usado en las calderas de la industria cementera, lo que a su vez generará recursos con la economía circular.
Luis Felipe Calderón, gerente de la Promotora de Proyectos Ambientales, explicó que “los residuos llegarán a una prensa, serán compactados a una tonelada por metro cúbico, luego serán embalados en polietileno a alta densidad durante ocho años, con lo que se obtendrá energía que podrá reemplazar el carbón en las industrias”.
Por su parte, Sebastián Arboleda Cardona, gerente de Empresas Públicas de La Ceja, dijo que “nos dimos a la tarea de transformar nuestro servicio de aseo. Los rellenos sanitarios tradicionales llevan a una disposición de residuos sólidos y contaminación del aire libre. Por eso modernizamos nuestras tecnologías para tener una solución innovadora y amigable con el medio ambiente, al paso que aportamos a la transformación energética”.
De esa manera, con la PIATRS se mitigarán los impactos negativos al medio ambiente, pues la generación de lixiviados se reducirá en un 90 %, la producción de biogás en un 95 %, los olores en un 98 %, los gases de efecto invernadero en un 80 %; además se reducirán las plagas, la contaminación del suelo y fuentes de agua. El costo del proyecto, único en la región, asciende a los $12.066.355.000.