Fuente: Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas
El pasado 22 de septiembre del 2023, Pureza Idárraga madre de tres hijos asesinados en el corregimiento de Santa Ana de Granada a causa del conflicto armado, despidió y tuvo la posibilidad de llevar al cementerio a su hijo, Jairo César García, quien estuvo desaparecido hace 18 años y gracias a las investigaciones adelantadas por la Unidad de Búsqueda de personas dadas por desaparecidas, ahora pudo despedirse de él.
Las investigaciones dan cuenta que en septiembre de 2004 el Ejército Nacional presentó a uno de sus hijos, Álvaro, de 18 años, como un guerrillero muerto en combate, el cual su cuerpo fue llevado al cementerio de Cocorná, a los ocho meses, el 6 de mayo de 2005, también apareció muerto su hijo Javier, de 15 años, el cuerpo fue encontrado en Granada, y un mes después, el 23 de junio de 2005, desapareció Jairo César el último de sus hijos, de 21 años edad quien fue arrebatado de la vereda La Estrella y que apreció al día siguiente, según el reporte, en el municipio de San Rafael.
“Me vine para acá, si no me vuelvo loca, porque mis hijos estaban con nosotros. Yo me enfermaba, me dolía la cabeza, me daba hasta vómito, estaba que me volvía loca. Me vine para Santa Ana a vender agua, a vender limonadas. Sufrí mucho, pero aquí estoy” expresó Pureza, luego de que le preguntaran qué hizo después de la desaparición de Jairo César.
Luego de esto, la llamaron a informarle que su hijo lo habían encontrado muerto en la vereda El Tesorito de San Rafael y que su cuerpo estaba en el cementerio a lo que ella se negó a ir.
Según información suministrada, Santa Ana era considerado un pueblo guerrillero, mientras San Rafael era controlado por grupos paramilitares. Así mismo la investigación data que en el 2007 el Observatorio de Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario de la coordinación Colombia-Europa-Estados Unidos, reseñó 110 ejecuciones extrajudiciales en el Oriente antioqueño entre 2002 y 2006. 30 de estas correspondían a Granada, casi todas en el corregimiento Santa Ana. Allí nombraban los casos de dos hijos de Pureza: Álvaro de Jesús y Javier Augusto.
Los datos e información entregados en el informe agregaban que de los 118 combates reportados por la Cuarta Brigada, el 40% correspondían a ataques del Ejército a la población civil, mientras que, de las 219 muertes en combate reportadas, el 38% correspondían a ejecuciones extrajudiciales.
El 8 de septiembre del 2021 tras investigaciones adelantadas por la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas —UBPD, en el cementerio de San Rafael, recuperaron el cuerpo de Jairo Cesar.
“Les sorprendió que alrededor del cúbito y el radio aún conservaba una manilla de color negro con letras rojas y amarillas. Su ropa estaba deshecha, su cuerpo estaba reducido a los huesos, mientras que la manilla había sobrevivido a la descomposición y la humedad de ese municipio rodeado de embalses e hidroeléctricas” dice el relato de la Unidad de Búsqueda.
Jairo César fue el primer cuerpo que la Unidad recuperó en esta subregión, incluso este caso ha permitido crear el Plan Regional de Búsqueda del Oriente Antioqueño en el que se basarán para buscar a los demás desaparecidos.
Cabe mencionar que en los cementerios de Cocorná y Rionegro la UBPD, intentarán identificar más de 170 cadáveres de los 3.252 desaparecidos en el Oriente Antioqueño.
“Habrá quien diga que el negro es el color de la despedida. Sin embargo, también habrá quien diga que existe el rojo pureza, el mismo que le gustaba a Jairo César, el mismo que hoy viste la madre, el mismo que tiñe la caravana que asciende al cementerio de Santa Ana a despedir al muchacho, el mismo rojo pureza que un tiempo fue tristeza y ahora es alegría” Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas.
