En el barrio Campo Valdés de Medellín se realizó un operativo en coordinación entre la Secretaría de Salud y la Inspección de Protección Animal, donde se verificó una vivienda que en su interior tenía 17 mascotas, caninos y felinos que eran cuidados por una persona adulta y dos menores de edad.
Este lugar se encontraba con mala ventilación, con gran cantidad de materia fecal, orina en el piso, recipientes para la comida en mal estado, sin cumplir las condiciones de salubridad mínimas para estos caninos
relataron desde la Policía Metropolitana.
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Los animales tenían enfermedades como dermatitis, hipertricosis, escoriaciones y lesiones en diferentes partes del cuerpo.
Ante dicha situación la Secretaría de Salud “emitió concepto desfavorable, compatible con maltrato animal tipificado en negligencia y maltrato físico, justificado en las condiciones en las que fueron hallados los animales, ocasionando una afectación en la salud e integridad física de los mismos”, declaró la entidad.
En este contexto, se realizó la aprehensión de los 12 caninos y los cinco felinos, los cuales fueron trasladados al Centro de Bienestar Animal La Perla.
