A las 2 de la tarde del 25 de junio de 2017 la embarcación El Almirante, que navegaba sobre las aguas del embalse Peñol-Guatapé, desapareció poco a poco entre las aguas con 167 personas a bordo. Hoy, un año después, familiares de las nueve víctimas que no lograron contar la historia, regresaron al malecón del embalse para conmemorar esta triste fecha.
Alina Cantor, hija de Lupita Cantor, una de las siete mujeres que pereció en el trágico accidente, narró cómo fue volver al sitio donde su madre estuvo por última vez.
“Es un año en el que hemos tenido el alma rota, volver aquí es sentir un cuchillo en el corazón, pero también pensamos en que ese, el último paseo para nuestra adorada madre, ella fue muy feliz”, dijo Cantor a MiOriente.
La conmemoración, que estuvo a cargo de la Administración Municipal y demás autoridades del municipio, inició con una misa campal que terminó con las palabras del alcalde del municipio, Hernán Darío Urrea, quien les dijo a las familias que no se sintieran solas, pues mencionó “que esta tragedia es también nuestra (municipio de Guatapé) y marcó un antes y un después en nuestra localidad”.
Posterior a la eucaristía, lanchas con familiares de las nueve personas fallecidas navegaron hasta el punto exacto del hundimiento para regar pétalos de rosas blancas en el agua y recordar a sus seres queridos. Allí, el mandatario local volvió a referirse a las familias.
“Esta será siempre su casa, con seguridad después de ese lamentable hecho, hemos mejorado y lo seguiremos haciendo. No volverá a suceder”, concluyó Urrea.
Así, entre lágrimas de los familiares y la bendición de un sacerdote que acompañó las lanchas, culminó el sentido homenaje un año después de que entre las aguas, desapareciera El Almirante.