Se estima que los trabajos cuesten cerca de USD 25 millones, cubiertos en gran parte por la póliza de seguros.
Un total de 30 kilómetros de cables, accesorios y herramientas llegarán en los próximos días desde México hasta Rionegro, los cuales serán empleados en la reparación del tramo de cables dañado en la central hidroeléctrica Guatapé, tras el incidente registrado el pasado 15 de febrero por un problema técnico que la tiene fuera de servicio y sin aportar su energía al Sistema Interconectado Nacional.
Inmediatamente se afectó la central, desde Empresas Públicas de Medellín iniciaron la búsqueda de los elementos requeridos para la restauración, según indicó el Gerente General de la entidad, Jorge Londoño De La Cuesta “desde ese instante comenzamos la búsqueda de los cables. Hicimos diagnósticos, analizamos alternativas con proveedores, servidores de EPM se desplazaron a México -donde están disponibles los cables- para adelantar la revisión técnica, y ejecutamos un gran operativo logístico para la importación de los insumos, que en las dos semanas venideras esperamos concluir con la llegada de todo el lote a Guatapé”.
Aproximadamente 800 toneladas es el peso del cable que se importará desde México, que fue fabricado por la firma Prysmian y que llegará directamente al aeropuerto José María Córdova, de Rionegro, en dos aviones tipo Antonov 124-100, con capacidad de carga de hasta 100 toneladas por vuelo y aunque este transporte podría hacerse en barco, la empresa señala que “por las dimensiones y peso de la carga, y la celeridad necesaria para iniciar las obras de reparación en la central se optó por dos aviones y se tendrán que hacer ocho viajes de ida y regreso entre México y Rionegro”, dice en un comunicado.
Luego de recibir los cables, accesorios y herramientas en el José María Córdova, estos se transportarán por tierra en vehículos especializados cama baja hasta el municipio de Guatapé, en un recorrido de 40 kilómetros. Este viaje toma entre seis y ocho horas, debido al peso de la carga y a la velocidad que deben llevar los carros por lo que EPM espera contar con un plan de tránsito especial por algunas vías del Oriente Antioqueño.
En septiembre entraría en funcionamiento el 100% de la hidroeléctrica
Un equipo de 100 personas de EPM, de diferentes áreas, acompañados por especialistas de la compañía Prysmian, trabajan para restablecer las operaciones, y en el proceso requerido, tras retirar los cables dañados, se incluyen las obras civiles, montar los soportes requeridos para la instalación de los cables, el proceso de tendido y empalme de estos, su acople a los transformadores y terminales de conexión a la subestación, y las pruebas técnicas que garanticen su correcta operación.
De acuerdo con el cronograma estimado, el restablecimiento de las primeras dos unidades de generación -de las ocho con las que cuenta la central- estará para mayo de 2016, en junio se calcula que ingresen otras dos unidades de generación y en agosto y septiembre próximos, las demás.
Las obras de reparación, con un costo cercano a USD 25 millones, serán cubiertas en buena medida por la póliza de seguros. El costo más alto para EPM será el lucro cesante de la planta, más los deducibles de la póliza de seguros. Todo esto se estima entre $200.000 millones y $300.000 millones.
Evacuarán agua del embalse de El Peñol para surtir otras centrales
Además de los trabajos que se adelantan en la central hidroeléctrica Guatapé, la entidad comenzará la evacuación del agua de la represa de El Peñol para que surta a las centrales de generación de energía que se encuentran aguas abajo: Jaguas, Playas y San Carlos (Isagen), ubicadas también en el Oriente Antioqueño.
Foto: cortesía EPM.
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