La zona de embalses, en especial los municipios de El Peñol y Guatapé, en los últimos años ha tenido un importante crecimiento turístico, se ha convertido en un destino muy apetecido; la represa El Peñol-Guatapé se fue consolidando como el centro, el motor y el atractivo para los visitantes.
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Específicamente en el municipio de El Peñol se construirá un importante proyecto hotelero, en inmediaciones de las veredas El Morro y Uvital. El proyecto ha sido un tema controvertido, ya que, cuatro personas que viven en El Morro, pidieron la nulidad simple de la licencia de parcelación para la construcción del complejo hotelero Yuniko. La medida cautelar les fue negada y ellos presentaron el recurso de reposición, el cual fue resuelto reafirmando la decisión; los demandantes pidieron el recurso de apelación, el cual les fue concedido, pero a la fecha no ha sido resuelto.
¿Qué argumentan los demandantes?
Los demandantes del proyecto se basan específicamente en cuatro argumentos: expresan que no se realizó la notificación a vecinos y a la comunidad; falta de certificados de disponibilidad de servicios públicos y vertimiento de aguas; dicen que no se cumple con la densidad de uso del suelo y que no se especifican las obligaciones urbanísticas; temen caos vehicular en el sector.
En resumen, estos son los cuatro argumentos que tienen los demandantes, indicando presuntas inconsistencias encontradas en el trámite de la licencia de parcelación.
La respuesta del juzgado
Sobre el argumento de que no se realizó la notificación a vecinos y a la comunidad, el juzgado definió: “De acuerdo al material probatorio allegado por la parte demandante, el Despacho NO evidencia que la valla no haya sido instalada incumpliendo lo dispuesto por la norma, pues no se desprende que se haya ubicado en una zona de difícil acceso; además, contrario a lo expresado por la parte demandante, la información consignada en la misma coincide con la radicación”, se lee en la resolución de la medida cautelar del juzgado.
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Respecto al argumento de los demandantes de la falta de certificados de disponibilidad de servicios públicos y vertimiento de aguas para el proyecto, el juzgado resolvió que “De los argumentos esbozados por la parte demandante frente a este particular, el Despacho encuentra que confunde certificación con autorización y que los alcances de una y otra son muy disímiles”, expresó la juez. Además, Yuniko tenía disponibilidad del acueducto veredal y, adicionalmente, cuenta con permiso de Cornare de vertimiento desde el 14 de diciembre de 2020 con un sistema de tratamiento y purificación para devolver el líquido en condiciones iguales después de usarlo; y con concesión de aguas desde el 15 de diciembre de 2021, lo cual les da la facultad de captar agua de la represa y potabilizarla para su uso.
Referente a que el proyecto no cumple con la densidad de usos del suelo rural, se lee en la resolución de la medida cautelar: “Teniendo en cuenta que la Resolución 365 del 16 de diciembre de 2019 fue expedida con anterioridad a la expedición y entrada en vigencia del Acuerdo 418 de 2021 emanado de CORNARE, no le es ni aplicable ni exigible el cumplimiento de tales normas y en consecuencia el Despacho se abstendrá de hacer cualquier análisis adicional”.
En el punto donde los demandantes expresan que no se especifican las obligaciones urbanísticas, el juzgado dijo que “de conformidad con la presunción de legalidad de que gozan los actos administrativos, y atendiendo a la aprobación e incorporación de tales planos en el trámite de licenciamiento en estudio, se colige que las obligaciones urbanísticas resultantes de la licencia de parcelación SÍ fueron especificadas en dicha licencia. Por lo anterior, este cargo tampoco está llamado a prosperar”.
Si bien dentro de la demanda no argumentaron el temor del caos vehicular en el sector, sí ha sido uno de los puntos que los demandantes han expresado respecto al proyecto. Sobre esta situación, el proyecto Yuniko hizo un estudio de movilidad en la zona, en el cual plantean como alternativa para el uso del transporte privado y/o público que conecte a los usuarios con Yuniko, ”aprovechar la ventaja que ofrece un sistema de transporte a través del agua para conectar llegadas y salidas del sitio”, se lee en el estudio de movilidad.
Los datos de vehículos, según el estudio, a lo largo del día típico y no típico son muy similares: el miércoles de 1.164 vehículos y el domingo de 1.105 vehículos, donde el modo principal es la motocicleta, seguida del automóvil.
Se estima que el proyecto genere un máximo de 71 vehículos en periodos pico p. m. (post meridiem) de la movilidad para la etapa 1, y para la etapa 2 de 68,28 vehículos. Según esto, el incremento de vehículos —con respecto a las horas pico— que genera el proyecto en su primera etapa es de tan solo el 6 % del aforo actual de la vía y un 6 % más de la segunda etapa, para un total de tan solo el 12 %, lo que evidencia que sí genera un impacto pero no tan significativo. Además del estudio de movilidad que se realizó para la construcción del complejo hotelero, también desde el proyecto Yuniko han hecho aportes a la comunidad para mejorar la vía y mantenimientos al tramo vial.
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La posición de la comunidad
La comunidad de la vereda El Morro ha tenido un contacto directo con el proyecto Yuniko. James Usme Morales, el presidente de la Junta de Acción Comunal, expresó que todo el tiempo los representantes del proyecto Yuniko ha hecho constantemente reuniones para la socialización con los habitantes de El Morro y Uvital, buscando múltiples alternativas, desde reuniones presenciales hasta reuniones virtuales.
Como presidente de la Junta de Acción Comunal, conozco lo diligentes que han sido, es el primer proyecto que está velando por el beneficio de la comunidad. Ellos se han dedicado a organizar las vías, y la mano de obra, calificada y no calificada, han querido siempre que sea de aquí del municipio de El Peñol, especialmente de la vereda El Morro y Uvital
sostuvo James Usme, presidente de la JAC El Morro.
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La comunidad ha estado muy sorprendida porque disminuyeron los trabajos de la obra. La Junta de Acción Comunal no se opone al proyecto: “El proyecto traerá muchos beneficios. Creo que otras construcciones de veraneantes se hacen bajo otras circunstancias y no con la legalidad que Yuniko tiene. La inconformidad es de dos o tres que se quieren oponer a que el proyecto se lleve a cabo, mientras que la comunidad ha visto con buenos ojos el proyecto”, enunció James Usme.
Las voces de la comunidad respaldan el proyecto y manifiestan que se sienten beneficiados con él. La Junta de Acción Comunal señala que más del 90 % de las personas están de acuerdo con que el proyecto se lleve a cabo.
Referente al tema, la secretaria de Planeación del municipio de El Peñol informó a nuestro medio que el proyecto “tiene licencia de parcelación otorgada en 2019 y están tramitando licencia de construcción: en este momento está en revisión el trámite”, declaró Liliana López, secretaria de Planeación.
Por lo pronto es este el panorama del proyecto Yuniko. Se espera que se resuelva el recurso de apelación que presentaron los demandantes.
