Los mitos, las guerras, los reyes y los milagros son la historia de la ciudad de Burgos. Aquí, una gigantesca estatua ecuestre del Cid Campeador –el mito fundante de esa entelequia llamada España- preside la entrada al casco histórico de la ciudad.
Una catedral colosal –a la que entramos solo en un tramo- guarda los restos del héroe. Aquí nació el viejo Imperio Español que los reyes católicos recibieron como un premio de lotería.
Unas ruinas de un castillo atestiguan esa historia. Burgos es la gloria y el poder perdido. Es un recuerdo con incensarios y catedral. Burgos, la magnífica, es una ciudad que vive de las glorias viejas. Un espejismo de recuerdos.