Por:Jorge Alberto Calle D’Alleman
Las recientes manifestaciones expresadas en el paro campesino que se estaba viviendo en el Oriente antioqueño ya evidencian sus implicaciones en la productividad y competitividad de la subregión.
Si bien el empresariado del oriente respeta el derecho a la protesta, por demás justificada de los campesinos por el abandono del gobierno nacional al sector y la lenta solución a sus demandas, lo cual se ha reflejado en las marchas a las que nos hemos visto avocados en los últimos días, los cierres de vías y algunas expresiones de revueltas, están afectando en gran medida el desarrollo del aparato productivo por cuenta del infarto en la logística por bloqueo de camiones en las empresas que impiden el despacho de mercancías, la imposibilidad de movilización de insumos, materias primas y material de empaque desde los proveedores locales y nacionales hacia los centros de producción y la imposibilidad en sectores como el floricultor de ajustar la logística hacia el aeropuerto José María Córdova, que hace que el material pierda conexiones internacionales y por consiguiente se desalinee la cadena logística del producto en la distribución en los EEUU, lo cual induce innumerables perdidas económicas al sector.
En conclusión, desde el empresariado se ven justificaciones en las marchas y necesidad de diálogo, pero elevamos una voz, para que estos procesos de concertación se hagan de manera ágil y pacífica de tal manera que no afecte la producción y su logística, pues no se justifica que adicionalmente a los problemas que están en discusión en este momento se sumen problemas de productividad al ya golpeado sector industrial.
Director ejecutivo Corporación Empresarial Del Oriente Antioqueño
