Con tan solo nueve años, Santiago Osorio, un niño soñador que batalla contra el cáncer desde hace varios años, cumplió, de la mano del Comando Aéreo de Combate No. 5 (CACOM 5), el sueño de ser piloto de la Fuerza Aérea Colombiana.
Tras una solicitud de la Corporación Esperanza de María Rosa Mística, entidad sin ánimo de lucro que vela por el bienestar de niños con cáncer y en condición de vulnerabilidad, los pilotos y tripulantes del CACOM 5 recibieron a Santiago en “La Casa de los Halcones Valientes” el fin de semana pasado.
“Santiago recibió de manos del Coronel Jaime Andrés Betancur, Comandante del CACOM 5, el overol de vuelo que caracteriza a los pilotos militares, uniforme que lució con orgullo mientras volaba en compañía de su abuela en un poderoso UH-60 Black Hawk”, explicó la institución en un comunicado.
Tras el vuelo, en el que Santiago compartió la cabina del helicóptero con experimentados pilotos, los oficiales de la unidad aérea lo recibieron con una calle de honor, un saludo militar y un caluroso aplauso.
