San Antonio de Pereira es uno de los sectores de Rionegro desde los cuales los ciudadanos han reportado a MiOriente, sobre todo en las horas de la noche, la presencia de gran cantidad de caracoles terrestres. Estos moluscos comienzan a ser motivo de preocupación para las personas que no saben si se trata de una proliferación repentina que no representa afectaciones o de una plaga dañina.
Jairo Henao, profesional del Grupo Bosques y Biodiversidad de Cornare, explicó que aunque la autoridad ambiental no ha recibido reportes oficiales, lo más seguro es que no se trate de caracoles africanos, una especie invasora que devora cultivos y jardines, y foco transmisor de parásitos que afectan la salud humana.
“Lo que hemos visto es otra especie de caracol que es el Helix aspersa, que había venido siendo explotado en varios cultivos, pero esta actividad se terminó en el municipio y la especie quedó sin ningún control invadiendo los espacios públicos, solares y las zonas verdes”, dijo Henao.
Si bien esta especie se puede convertir en una plaga, no representa ningún peligro para la salud de las personas. De hecho, el control de la especie se puede adelantar recogiendo, con el uso de guantes y tapabocas, los caracoles en recipientes que tengan agua o cal, y allí, tras un proceso de deshidratación de por lo menos cinco horas, los animales mueren.
“El enterramiento se debe hacer en espacios apropiados alternando capas de cal y de tierra para que los caracoles se descompongan adecuadamente”, añadió el profesional de Cornare.
