Luna, una canina de raza golden retrievier, de negros cabellos y ojos profundos, abandonó el plano terrenal, no por una condición de salud o por su edad: Luna murió a causa de la pólvora. Los estallidos del 30 de noviembre al amanecer del 1 de diciembre, en la alborada, hicieron que su corazón se detuviera.

Luna.

La familia de Luna atraviesa uno de los duelos más dolorosos, la pérdida de una mascota. La impotencia de no poder detener las detonaciones los embarga y Luna, ahora en el cielo canino, que esperamos que exista, cuida de su familia que pide que no se detone más pólvora en esta época que debería ser de felicidad y no de angustia en una noche tormentosa y de dolor.

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    “Nosotros nos preparamos mucho con ellos, en especial con Luna. Nuestra perrita era muy nerviosa; hay algunas razas de perros que son más nerviosos que otros y los retriever son mucho más susceptibles, por eso siempre antes del alborada nos preparamos, organizamos una habitación donde creemos que menos ruido se siente, llevamos el equipo y ponemos música para tranquilizarlos”, relata, buscando en los recuerdos, su familia.

    La familia de Luna guardaba la esperanza de que este año la pólvora fuera menos detonada:

    Pensábamos que de pronto, con tantas campañas que se han hecho, con tantas personas que han resultado quemadas, que la gente como que se iba a curar un poquito más en salud y evitar esa situación, pero, lamentablemente, no es así

    expresaron.

    Su compañera de ladridos presentía lo que iba a ocurrir: “Cuando murió, la otra perrita, Chabelita, se sentó al lado, y no dejaba que las otras se arrimaran, y la miraba, y la miraban, como con ese asombro. Nos dejó con el corazón partido”.

    Los animales mueren a causa de la pólvora, esa es una realidad

    No es que la gente se invente que la pólvora le hace daño a los animales, no es cuento, es una realidad. Hay animales que mueren a causa del ruido de la pólvora, no solo perritos y gatitos, los pájaros e incluso los insectos, pues no es solo el sonido, es el brillo de las luces que afecta también a los animales. Lo que para ellos puede ser 10 minutos de felicidad, puede ser meses de dolor para una familia que pierde a un ser querido, porque ellos se vuelven parte de la familia, son para nosotros parte de nuestra familia”, es el mensaje que envía la familia de Luna.

    La pólvora contamina y arrebata vidas de los más inocentes

    Víctor Manuel Vélez, biólogo del Área Metropolitana del Valle de Aburrá, recordó que la pólvora no solo causa contaminación en el aire, sino que además puede llevar a la muerte de perros, gatos, aves, entre otras muchas especies. 

    En el caso de las aves, el estallido de la pólvora puede ocasionar desorientación, el abandono de sus nidos, y, por ello, los polluelos pueden presentar hipotermia y hasta morir. En muchos casos, el estruendo hace que las aves pierdan su rumbo y colisionen con estructuras, dejándolas gravemente heridas; e incluso puede provocarles hemorragias internas por ruptura de estructuras y órganos al interior de sus cuerpos, quitándoles la vida de manera inmediata.