624 seguidores del Bucaramanga asistieron para ver el partido entre el Deportivo Rionegro. Disturbios fueron protagonizados por menores de edad. Lesionados no se dejaron atender por organismos de socorro.
El sábado 20 de julio, hinchas del Bucaramanga llegaron al municipio de Rionegro para asistir al partido entre los Leones del Oriente y Los Leopardos. Antes del cotejo, los seguidores del equipo visitante se pelearon entre ellos mismos, causando desmanes cerca del estadio.
“Las barras tienen problemas de fronteras invisibles y de microtráfico en Bucaramanga y se encontraron cerca al Coliseo del Cielo, donde con armas blancas y bombas incendiarias se enfrentaron”, dijo a este medio el Capitán de la Policía Óscar Ospina, comandante de la estación Rionegro.
Lectores de MiOriente denunciaron a través de redes sociales que seguidores del equipo visitante asaltaron a varios transeúntes y vendedores del sector. Una ceremonia religiosa de los Testigos de Jehová que se realizaba en el estadio tuvo que ser interrumpida por los enfrentamientos.
La mayoría de los aprehendidos fueron menores de edad. El próximo miércoles las autoridades de Rionegro decidirán si se les impide el ingreso al municipio para futuros partidos a los seguidores del equipo bumangués.
Para controlar los desmanes fue necesaria la intervención de policías de otros municipios, en total participaron cerca de 250 uniformados.
