Con una buena asistencia de público al estadio Alberto Grisales, Rionegro cayó 3-2 ante Junior en el partido de ida de la semifinal de la Liga Águila y ahora deberá ir a Barranquilla el próximo domingo, con el objetivo de dar vuelta a la serie y clasificar por primera vez a la final del rentado colombiano.
Tras 20 minutos fatales en el segundo tiempo, donde Junior marcó tres anotaciones (Jarlan Barrera y Luis Díaz en dos oportunidades) que parecía sentenciar la serie, el equipo del Oriente reaccionó en las postrimerías del juego y logró marcar dos goles (Carlos Ramírez y Humberto Osorio Botello) para seguir con vida y soñar con clasificar a la final.
“Valorar lo que los muchachos fueron capaz de hacer, no es fácil estar tres goles abajo y tener una reacción con tanta gallardía, de verdad que hay que valorarlo, nosotros hemos querido que los muchachos generen más fútbol, hoy había un equipo al frente con mucha jerarquía y hoy lo demostró”, expresó Sergio “Jeringa” Guzmán, asistente técnico de Rionegro.
Ante Junior, dos jugadores del Oriente Antioqueño tuvieron la posibilidad de estar en el campo. Juan Diego Giraldo ingresó en la etapa inicial por Jhonny Vásquez, quien se retiró lesionado; mientras que el atacante Sebastián López entró al minuto 72 por el argentino Leandro Velásquez.