Una paciente en estado de gestación ingresó el pasado primero de enero del 2016 a las 2 de la mañana en trabajo de parto al Clinica San Juan de Dios de La Ceja y por presunta negligencia de los profesionales, fallecieron el bebé y ella.
Al llegar la paciente al centro de salud, le dijeron que tenía dolores pélvicos pero no contracciones, por lo que la ginecóloga que la diagnosticó no quiso prestarle la atención médica a la madre. “A las nueve de la mañana en el monitoreo que le hicieron el bebé estaba vivo, ya a las 3 de la tarde ella se nos desmayó y dejó de respirar, la ginecóloga fue y le hizo un monitoreo y el bebé ya no se sentía, la subieron a una camilla directo para la sala de cirugía, al rato salió una doctora a decir que el bebé había nacido muerto, la cesárea que debieron haberle hecho antes se la hicieron en ese momento, ella se nos desangró, le dieron cuatro paro cardiorrespiratorios y nos la mató”. Relata Tatiana Grajales, una familiar de la paciente.
Según dicen los familiares, si a la joven se le hubieran practicado monitoreos cada hora se habrían salvado los dos, pues al parecer, la placenta se desprendió y el bebé se ahogó en la cavidad vaginal.
Por los hechos ocurridos con la joven madre, identificada como Jennifer Grajales de 21 años, sus familiares piden que se haga justicia y se abran las debidas investigaciones con la entidad sobre lo que ocurrió. Un abogado asesorará a la familia en todos los trámites legales.
MiOriente se comunicó dos veces con la Clínica, pero la secretaria del Director afirmó que el funcionario se encuentra de viaje y no podía atendernos, esperamos la próxima semana conocer la versión del centro asistencial.
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