Con esas palabras, Miriam Echeverri relató el día a día que vive con su hijo, un menor de edad que ya se ha accidentado tres veces y que a pesar de las lesiones que ha sufrido continúa exponiendo su vida al practicar gravity bike por las vías del Oriente Antioqueño.
“Él me ha dicho: ‘mamá, si yo muero, muero feliz’, entonces, aunque yo le he hablado y le he explicado los peligros que puede tener al hacer eso, es muy difícil que comprenda”, contó la angustiada madre, quien además fue la única participante de la charla de sensibilización dictada por la Alcaldía de El Carmen, a través de la Secretaría de Movilidad.
Mientras se realizaba la asesoría, un menor de edad fallecía en ese momento en la vía Rionegro-El Carmen a la altura de Avinal. “Yo ya viví eso y sé lo difícil que es, aunque gracias a Dios a mi hijo lo tengo vivo, así que no me imagino lo que puede estar sintiendo esa mamá al recibir la noticia”, agregó Echeverri.
Al finalizar la charla, el menor, a quien le habían decomisado la bicicleta por estar adaptada para la práctica de gravity bike, dialogó personalmente con los funcionarios de la Administración Municipal y junto a su madre firmaron un compromiso para no volver a realizar esta actividad que ya ha cobrado la vida de dos jóvenes en la última semana.
