Si bien a comienzos de marzo las religiosas del Monasterio de las Hermanas Carmelitas, ubicado en la vereda San Nicolás del municipio de La Ceja, se vieron afectadas para la producción de hostias por la falta de agua, las lluvias de los últimos días han facilitado que se normalice esta situación.
El acueducto de la vereda tuvo dificultades para suministrar el servicio a la comunidad de la zona y por esta razón, a las hermanas les fue entregado un tanque de agua que en el claustro alcanzaba solo para algunas labores esenciales.
La preocupación en el monasterio era porque al tener detenida la producción de la comunión, las religiosas no podrían cumplir con la demanda de algunas parroquias para las que distribuyen las hostias, sobre todo en época de Semana Santa, pero según dijo la Madre Alba María de la Santísima Trinidad, “con el agua se ha normalizado todo”.
Foto: apoyo
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