Preocupa la cantidad de menores de edad quemados por pólvora en lo que va corrido de diciembre en el departamento de Antioquia. En total, siete de los 16 lesionados registrados son menores, cifra que deja mucho qué desear sobre la apropiación de los adultos de las campañas de prevención en esta materia.
Según la Secretaría Seccional de Salud y Protección Social de Antioquia, los dos nuevos casos se registraron en zona rural de Guarne, donde un hombre de 22 años tuvo que ser sometido a la amputación de su brazo por manipular un taco, y en Medellín, donde otro ciudadano de 47 años sufrió lesiones de segundo grado cuando, en estado de embriaguez, manipulaba un volador.
“En caso de que los adultos sean sorprendidos quemando pólvora, tendrán que pagar una multa de hasta $3’100.000, y los padres de niños que resulten quemados tendrán que cumplir sanciones de hasta cinco salarios mínimos legales”, informó Victoria Eugenia Ramírez, secretaria de Gobierno de Antioquia.
Es decir que a la fecha se presenta una reducción del 11% en el número de quemados, pues en el 2017 eran 18 los casos para estas mismas fechas. Solo en la noche de velitas, 38 personas resultaron quemadas con pólvora en todo el territorio nacional.
Con respecto a las cifras del Oriente, la Alcaldía de Rionegro solicitó enmienda del caso registrado en su jurisdicción, pues afirma que el sitio donde ocurrió corresponde a Envigado. Los demás (El Carmen, El Santuario y Guarne) registran cuatro casos; dos de ellos en el primer municipio mencionado.