El lunes 30 de agosto, hacia las 7 de la noche, un huracán se llevó a su paso los techos y enseres de las viviendas ubicadas en la vereda El Entablado, en Cocorná. Según el registro de la comunidad, hubo pérdida total en cuatro casas y cinco más tuvieron daños parciales, es decir, vieron destruidos la mitad de los techos.
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Berta Nubia Botero, docente de la vereda, definió como un completo terror la tempestad del lunes donde el agua inundó todos los rincones de las fincas, provocó derrumbes y deslizamientos en las carreteras que comunican al territorio con Cocorná.
Comienza a hacerse un huracán. El huracán comenzaba a volar los techos, los troncos de madera de los árboles empezaron a volar lejos, empezaron a volar piedras. La comunidad quedó a la intemperie, uno creía que era el fin de todos nosotros
relató Berta Nubia Botero, profesora de la vereda El Entablado.
Dijo, incluso, que los niños faltaron a clases porque no tenían ropa para vestir, “no tenían ni interiores, todo se lo llevó el huracán”. A las pérdidas se les suman las afectaciones a los cultivos, dado que la lluvia arrastró las siembras de cacao, plátano y yuca: “no tenemos de qué vivir” es el mensaje de la gente.
El clamor de la comunidad es claro: “necesitamos ayuda, necesitamos enseres, ropa, camas”. Si usted quiere ayudar a los damnificados, puede comunicarse al celular 3104129665, ese es el contacto de Berta Nubia Botero, docente de la vereda.
Finalmente, integrantes del Consejo Local de Gestión del Riesgo de Cocorná a esta hora están realizando una evaluación de las afectaciones y posibles contingencias, para diseñar un plan con el fin de mitigar los estragos causados por el clima.