El Fenómeno del Niño ya es tema de discusión entre las autoridades ambientales del país, y el Oriente Antioqueño no es la excepción. Se espera que la temporada más crítica de sequía se presente entre mediados de enero y mediados de febrero del 2019, por lo que Cornare ya comenzó a establecer comunicación con los diferentes municipios de la región para mitigar los impactos de la misma.
Diana Henao García, jefe de la Oficina de Ordenamiento Ambiental del Territorio y Gestión del Riesgo de Cornare, explicó que varios profesionales de la autoridad ambiental están verificando el alistamiento de los cuerpos de bomberos de la región, y comunicándose con las juntas administradoras de los acueductos y empresas públicas de servicios para que se preparen con planes contingencias ante la eventual escasez de agua.
“A partir de esta semana comienzan a disminuir las lluvias y a incrementar las temperaturas, por eso ya hay un documento dirigido desde el Consejo Nacional de Política Económica y Social (CONPES) hacia todas las entidades ambientales del país, para que estas apliquen planes de contingencias”, explicó Henao.
Cornare ha puesto especial atención a la vigilancia y monitoreo de los bosques, pues durante el Fenómeno del Niño aumentan los incendios forestales, muchos de ellos causados por la quema irresponsable de pólvora.
De este modo, aunque al parecer esta temporada de sequía no será intensa sino moderada, hay municipios como Rionegro, Guarne (en algunas veredas), San Vicente, Marinilla, El Santuario y San Francisco, que están llamados a adelantar desde ahora campañas de racionalización del agua y de cuidado de los bosques.
