Luz Marina Sánchez fue diagnosticada con depresión y trastorno obsesivo compulsivo, razón por la cual fue remitida para su tratamiento al Hospital Mental de Antioquia, ubicado en el municipio de Bello, donde además debían suministrarle algunos medicamentos cada mes.
La mujer, que vive en zona rural de San Vicente, cuenta con pocos recursos económicos y tiene problemas de visión, situación que la hace propensa a sufrir accidentes en las calles de la capital antioqueña donde, entre otras cosas, no está acostumbrada a caminar.
Este fue el motivo por el que la paciente pedía ser atendida en alguna IPS más cercana, por ejemplo en el municipio de Rionegro, donde podría ahorrarse la mitad de distancia con respecto al lugar donde es atendida actualmente.
La petición no fue escuchada y Luz Marina decidió tutelar sus derechos fundamentales de la salud, la seguridad social e integridad personal, recurso que no fue aceptado por el Juzgado Promiscuo Municipal de San Vicente, el 6 de junio de 2017.
Sin embargo, la tutela fue enviada a revisión en el alto tribunal que resolvió anular la decisión anterior y ordenó a Savia Salud trasladar el tratamiento al Hospital San Juan de Dios de Rionegro, al cual deberá ser remitida toda la información necesaria para continuar con el tratamiento que la paciente requiere.
