El clásico antioqueño entre Atlético Nacional e Independiente Medellín finalizó con triunfo 2-1 para el conjunto verdolaga, en un duelo intenso que dejó emociones, discusiones y un cierre polémico.
Aunque el compromiso terminó sin mayores inconvenientes dentro de la cancha, el verdadero conflicto se presentó al ingreso a los vestuarios, donde una fuerte confrontación entre jugadores de ambos equipos alteró el final. El hecho se originó después de una patada de Matheus Uribe a Washington Aguerre, acción que detonó un tumulto cuando ambos equipos se dirigían a los camerinos.
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La situación obligó al árbitro Wilmar Roldán a actuar con firmeza. Tras evaluar los incidentes ocurridos en la zona de acceso a los vestuarios, el juez decidió expulsar a Washington Aguerre, Matheus Uribe y Harlen “Chipi Chipi” Castillo, dejando claro en su informe la gravedad de la confrontación.
A pesar de la victoria 2-1 de Nacional, el episodio posterior al pitazo final y podría desencadenar sanciones adicionales.
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