En los días que la planta de Rionegro permaneció cerrada dejó pérdidas cercanas a los 200 millones de pesos.
Personal del INVIMA encontró en una nueva visita las condiciones sanitarias que garantizan el sacrificio de animales por parte de INCAROSA. “La mayoría de los requisitos fueron cumplidos por la planta, ahora vamos a evaluar las operaciones y el funcionamiento de ellos” dijo a MiOriente, Javier Enrique Andrade Hernández, Coordinador grupo territorial occidente uno del INVIMA.
“Se dio cumplimiento en los requisitos como mejoramiento de la parte de infraestructura y mantenimiento de equipos. Desde hoy estamos en funcionamiento, damos ese parte de tranquilidad”, afirmó Hugo González Arias, Gerente General Centro de Faenado de Rionegro.
El Centro de Sacrificio Frigocarnes del municipio de Marinilla también comenzó a operar este martes 25 de junio.
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