A las 9 a. m. de este martes 3 de octubre se dieron cita, en varios lugares del país, empresarios y trabajadores de la industria textil colombiana, para marchar “con el fin de concientizar a los colombianos y al Gobierno de la importancia de defender la industria colombiana”, como lo manifestó la Cámara Colombiana de la Confección y Afines, mediante un comunicado que “respalda la iniciativa de los empresarios.
Municipios del Oriente Antioqueño como El Santuario, donde la confección y la industria textil componen un “renglón importante de la economía de la población y aporte a la economía nacional”, según declaraciones de Germán Campiño, microempresario santuariano, también se unen a esta movilización.
El vocero santuariano también le indicó a MiOriente que “queremos decirle al Gobierno Nacional que no somos 250.000 personas las que vivimos de la confección en Colombia, sino que somos un gremio de más de un millón ochocientas mil personas vinculadas directamente y muchas más indirectamente”.
Según líderes de la industria textil en Colombia, el Gobierno está siendo permisivo con el contrabando textil en el país. “Senadores han hecho denuncias este año en Fiscalía al respecto”, anotó Campillo. Adicional a esto, los aranceles “blandos” establecidos por el Gobierno, frente al ingreso de mercancías asiáticas “donde son del 15 % y se han negado a la petición de incrementarlo al 40 %, para reducir el contrabando técnico, es un hecho que afecta fuertemente nuestra industria”.
Al respecto, el senador Luis Fernando Velasco, quien ha apoyado la movilización de este martes, indicó mediante su página web que “la situación que enfrentan los confeccionistas del país es compleja. El Gobierno tenía unas normas muy interesantes para equilibrar al confeccionista colombiano con sus competidores del extranjero, que permitieron lograr un crecimiento importante de la industria y del empleo nacional, pero de una manera inexplicable, el año pasado la exministra Lacouture cambió las normas y le entregó el mercado nacional a los importadores”.
Mientras la mayoría de ciudades y municipios del país salieron a marchar a las 9 a. m., en El Santuario, municipio donde más de 2.500 personas se desempeñan directamente en confección, e indirectamente cerca de 7.000 vinculadas a más de cien empresas constituidas legalmente en el municipio, saldrán a las calles a la 1 p. m. para decir a una sola voz que “un país que no vela por su industria es un país pobre”.
