Desde que la Corte Suprema de Justicia dejó en libertad al exgobernador de Antioquia, Luis Alfredo Ramos, por vencimiento de términos en noviembre del 2016, el también excandidato presidencial se ha dedicado a dar conferencias por todas las universidades del país bajo la tesis “Los falsos testigos en el proceso, un cáncer de la justicia colombiana”. Esta vez, expuso sus puntos en uno de los auditorios de la Universidad Católica de Oriente, en Rionegro.
El sonsoneño narró con detalle cada una de las consecuencias que le trajeron a su carrera pública los falsos testimonios de varias personas en su proceso. En cuanto a los procesos judiciales en el país, el exgobernador indicó que “hay que poner plazos perentorios como pasa en todo el mundo. Los casos tiene que tener términos definidos y la justicia debe ser más rápida, porque si la justicia no es pronta, no es justicia”. Puntualmente, sobre los falsos testigos que hicieron parte de su proceso, además de mencionar el perdón que les concedió, enfatizó en que “lo hicieron por beneficios económicos”.
Para nadie es un secreto que el también exalcalde de Medellín es una de las fichas, si no la más importante, con la que el uribismo podría alcanzar de nuevo la Presidencia de la República. Sin embargo, Ramos ha dejado claro que no hablará de sus aspiraciones presidenciales hasta que no haya un fallo definitivo en su caso. Aunque no hay una fecha exacta para el fallo “tenemos la confianza de que pueda ser en este mes de mayo y por tardar junio. Pero son meras especulaciones”, apuntó.
Con respecto a su posible candidatura a la Presidencia de la República, Ramos manifestó que “primero voy a visitar al país, voy a conocer sus necesidades, las inquietudes y saber qué quiere la gente y quién quieren que los gobierne, para luego tomar esa decisión que es tan seria”, concluyó.
