Las autoridades también investigan el acompañamiento de civiles a la Fuerza Pública en la disuasión de los enfrentamientos con manifestantes.
Aunque la mayor parte de la jornada de movilizaciones en favor de las reformas del Gobierno nacional transcurrió con tranquilidad, en el caso de Medellín, sobre el final, se presentaron algunos actos violentos que obligaron a la intervención de la Fuerza Pública.
Los hechos se presentaron principalmente en inmediaciones del sector Punto Cero, cercano al búnker de la Fiscalía y la sede la Universidad Nacional, sobre la autopista Norte.
Encapuchados lanzaron artefactos explosivos en contra de uniformados de la Policía, lo que obligó a que agentes de la Unidad de Diálogo y Mantenimiento del Orden, antiguo Esmad, llevaran a cabo acciones para recuperar la tranquilidad en el sector.
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Se produjo la conducción de siete personas y la inmovilización de una motocicleta que venía siendo utilizada para transportar elementos explosivos
indicó el coronel José Rafael Miranda Rojas, comandante encargado de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá.
Por otra parte, la Personería de Medellín denunció la presencia de hombres de civil al lado de los agentes del Estado, que actuaron durante la intervención de estos lanzando piedras para agredir a manifestantes.
El personero distrital, William Yeffer Vivas, exigió una explicación de las autoridades, por lo que en las últimas horas el coronel Miranda aseguró que ya se adelantan las investigaciones respectivas.
Durante las manifestaciones que se concentraron de manera especial en el Parque de las Luces, cerca de La Alpujarra, también se registraron algunos ataques a periodistas que se encontraban cubriendo la movilización.
La Fundación para la Libertad de Prensa (Flip) rechazó este tipo de conductas a partir de otras situaciones que se presentaron en otras ciudades del país.
